El Renault Mégane RS sería la nueva “víctima” de la electromovilidad

La electromovilidad es un proceso que en su andar se ha llevado a respetados y queridos modelos. Les comentábamos del ocaso del Audi R8 que se despedirá con una poderosa edición y horas después nos enteramos que el Renault Mégane RS también será parte de los libros de historia del automovilismo.

Si bien es cierto que la noticia se podía prever, la verdad es que para los fanáticos será otro duro golpe. Pero lo cierto es que, con la mayor relevancia que tomó Alpine como marca deportiva dentro del Grupo Renault, no era difícil pensar en que la gama RS del rombo poco podría subsistir, más cuando los intereses están enfocados en la electromovilidad y la Renaulution.

Pero aunque algunos lo pudiesen imaginar, hacía falta alguna confirmación oficial. Y esta llegó desde Australia, donde el gerente de la firma gala en el país oceánico, Glen Sealey, dio la bomba en una entrevista al medio Drive.

“Desde el punto de vista de la producción, (el Mégane RS) no continuará más allá de fines del próximo año. La demanda de un hatchback deportivo está disminuyendo en Europa. Eso se puede reemplazar con un auto eléctrico. Y tiene sentido común cambiar”.

Las palabras del ejecutivo tienen fundamento en el razonamiento económico, de hecho, uno de los mercados que más demandaba hot Hatch del segmento C era precisamente el Viejo Mundo, algo que ha variado con fuerza en los últimos años.

De esta manera, la única opción para que el Mégane RS siga con vida (esperemos que no lo conviertan en otro SUV) es que adopte un camino electrificado, ya sea con una versión PHEV o totalmente eléctrico.

Cabe recordar que el Mégane RS es uno de los escasos hot hatch que aún se venden en Chile. Y pese a que en el sitio web dice que “temporalmente no hay unidades disponibles”, para cuando haya disponibilidad el precio va desde $ 41.990.000.

En cuanto a capacidades, tiene un motor turbo de 1.8 litros que desarrolla 300 Hp con un par de 390 Nm, asociado a una caja automática EDC de doble embrague de seis marchas, potencia que le permite ir de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos y cubrir 400 metros en 14 segundos, con una velocidad máxima de 250 km/h.