Irlanda y Gales optan por el reconfinamiento en Europa
Tras una constante y preocupante alza de casos, ambos decidieron restringir al máximo el movimiento. Son los primeros en Europa en volver a esta medida.
La mitad de los 48 países de Europa ha experimentado un aumento del 50% en los casos de Covid-19 en la última semana, según la OMS. La cifra es un potente indicador de cómo la segunda ola de la pandemia está afectando al Viejo Continente, que ya se ha visto obligado a reimponer restricciones a la movilidad, las reuniones sociales y establecer toques de queda. Incluso, hay países y regiones que decidieron ir un paso más allá, pese a los temores de un segundo impacto económico, luego del que se registró durante la primera ola. Así, la República de Irlanda, además de Gales, que pertenece a Gran Bretaña, son los primeros en Europa en volver a confinar a sus poblaciones.
“Entiendo, y siento muy personal y profundamente, la sensación de decepción, los sentimientos de soledad, quizás incluso la desesperación que traerá este anuncio para muchos”, señaló este martes el primer ministro irlandés, Micheál Martin, al declarar lo que probablemente era “el régimen más estricto de Europa”.
El gobierno irlandés acordó establecer duras restricciones a partir de la medianoche de hoy, las que durarán seis semanas, pero que serán revisadas después de cuatro. Según las reglas, se le pide a las personas que se queden en casa, solo podrán hacer ejercicio dentro de los 5 km de su hogar, no se permiten reuniones sociales o familiares en hogares o al aire libre. Además, tiendas y peluquerías no esenciales deben cerrar y bares y restaurantes solo podrán ofrecer un servicio para llevar. Eso sí, las escuelas permanecerán abiertas. El plan irlandés prevé poder celebrar la Navidad de una manera “significativa”.
Durante la primera ola, este país tuvo un peak de casos el 10 de abril con 1.508. Por estos días, los casos suman cerca de 1.200 diarios.
Gales, en tanto, con tres millones de habitantes, entrará en un bloqueo nacional “breve y agudo” desde este viernes hasta el 9 de noviembre. Así, se le pedirá a su población que se quede en casa, mientras que los pubs, restoranes, hoteles y tiendas no esenciales deberán cerrar. El ministro principal galés, Mark Drakeford, señaló que el confinamiento será “una conmoción breve y aguda para hacer retroceder el reloj, ralentizar el virus y ganar más tiempo”. Gales registra 128,2 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes.
Drakeford explicó que se necesitaba un cierre nacional, “en parte porque la brecha entre las partes de Gales donde no hemos necesitado cierres locales y las áreas con cierre local se ha ido reduciendo”. Las personas que infrinjan las nuevas reglas podrían ser multadas, con avisos de penalización fijos a partir de las 60 libras (US$ 78).
Por otra parte, el condado de Gran Manchester en Inglaterra no llegó a acuerdo este martes con el gobierno de Boris Johnson sobre el paquete de apoyo en financiamiento para la región. Con el fracaso de las conversaciones, el Gran Manchester quedará bajo el nivel 3 de restricciones del plan del gobierno, que es la fase más dura. Con ello, pubs, bares, centros de apuestas, casinos, centros de juegos para adultos, entre otros, deberán cerrar durante al menos 28 días. Además, se prohíben los encuentros sociales tanto en interior como en lugares exteriores. El condado recibirá fondos de ayuda por 22 millones de libras (cerca de US$ 28 millones) para pruebas y rastreo, muy por debajo de lo que había solicitado.
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