Piñera saca a jefe de puentes del MOP e inicia reestructuración

La muerte de Germán Mancilla el fin de semana pasada producto del colapso del puente Cancura -que une Puerto Octay con Osorno- desató una serie de cambios al interior del Ministerio de Obras Públicas, que dirige el economista Andrés Fontaine.

A la investigación que había anunciado el MOP en cuanto ocurrió la tragedia, se sumó la petición de renuncia que realizó el propio Presidente Sebastián Piñera al subdirector de Obras, Mauricio Pinto, y al jefe de la Unidad de Puentes, Jorge Campusano.

Lo anterior, según una alta fuente de esa cartera, se relaciona con una reestructuración al Departamento de Puentes y Túneles de la cartera para que en el futuro se transforme en una unidad con más recursos y un mayor poder de fiscalización. La misma fuente comenta que la situación era algo que se venía analizando desde antes del colapso del Cancura, pues existe una gran cantidad de puentes en el país que necesitan ser permanentemente monitoreados: 1.064 de 40 metros.

De hecho, el subsecretario Lucas Palacios viajará a Buenos Aires la próxima semana y se reunirá con personeros del Banco Interamericano del Desarrollo (BID) para llegar a acuerdos y buscar recursos con el fin de fortalecer los equipos a cargo de la fiscalización.

Respecto de la investigación interna, en la cartera explican que es algo que se encuentra en curso, pero al menos ya hay claridad de lo que habría ocurrido: hubo fallas humanas, tal como lo dijo el Presidente hoy.

"En el pasado hubo algunas negligencias en las labores de cuidado de los puentes, y por eso durante nuestro gobierno hemos hecho un esfuerzo muy especial en monitorear en forma más acuciosa y rigurosa", añadió.

Algo que ratificó el MOP a través de su declaración, donde señala que "con la finalidad de mejorar la manera con que el MOP se hace cargo de la seguridad de los puentes carreteros, se ha decidido poner en curso un proceso de reestructuración y fortalecimiento de la Dirección de Vialidad y, en específico, de la División de Puentes".

Un expersonero del gobierno de Bachelet explica que los funcionarios desvinculados son de carrera, es decir, que llevan años en el servicio y que no llegaron con la pasada administración.