Aplicación Cabify lanza nuevo servicio con sillas de retención

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Los móviles de la categoría "Baby" deberán ser solicitados con un mínimo de dos horas de anticipación. A partir del próximo lunes, 200 automóviles de la firma contarán con sistemas de seguridad para niños de entre cero y nueve años.




A tres semanas de que comience a regir la modificación en la Ley del Tránsito, que obliga a los vehículos livianos a utilizar sistemas de retención infantil cuando mantengan a bordo a menores desde cero a nueve años, la empresa de transporte privado Cabify anunció que a partir del próximo lunes 27 febrero estará disponible en su aplicación la nueva categoría "Baby", que contará con sistemas de retención adaptables según las características de cada niño.

"Muchas mamás nos comenzaron a decir que necesitaban este servicio. Ellas podían andar con su silla, pero si iban al cine o al aeropuerto, por ejemplo, no tenían dónde dejarla. Esa fue una de las razones principales por las que hicimos la inversión", afirmó Agustín Guillisasti, gerente general de Cabify en Chile.

La inversión tuvo un costo de alrededor de 150 mil dólares, incluyendo la compra de las sillas y la capacitación a los conductores. Según Guillisasti, la idea de esto "era ofrecer al cliente un servicio unificado".

Esta nueva categoría tendrá el mismo costo que un auto de la línea "light" de Cabify, y pondrá a disposición de los clientes dos modelos de silla. Uno, para niños de 0 a 25 kilos, y otro que soporta hasta 35 kilos y que puede ser adaptado como un alzador.

Las reservas de los automóviles deben realizarse con un mínimo de dos horas de anticipación, y también estará disponible la opción de programar viajes para fechas más lejanas.

En el caso de que se quiera viajar con más de un niño, "habría que poner en la reserva la cantidad de menores, porque el sistema está pensado para un solo niño". Esto no tendría un valor adicional para el usuario.

Francisco Frésard, ingeniero e investigador de transporte de la Universidad Católica, cree que esta medida es positiva, pero considera que "el problema es cómo encontrar el asiento de seguridad adecuado para un menor", teniendo en consideración las características particulares de cada uno.

Para Frésard, además, hay falencias en esta modificación a la normativa. "Está mal la solución del gobierno de imponer su uso -de sistemas de retención- hasta los nueve años, porque más que la edad, influye la contextura de los niños", señaló.

En tanto, Gabriela Rosende, secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito , manifestó que "esta modificación busca proteger a los niños, en un accidente, ya que ellos no pueden hacerlo solos".

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