Cómo se armó la parrilla y los que quedaron fuera de la última jornada

Café Tacvba y Jesse & Joy estuvieron a punto de protagonizar la parrilla.




Todos los lunes de la semana, desde junio de 2012, hubo reuniones en Chilevisión para definir las seis noches del certamen, que anoche desplegó su última apuesta, con Wisin & Yandel, Gloria Trevi, Pablo Alborán y Los Auténticos Decadentes (foto).

En los números, una jornada inferior a las predecesoras: sumando los salarios de su artistas (US$ 500 mil), alcanza apenas el valor de Miguel Bosé, el cuarto artista mejor pagado del Festival de Viña. Entre Elton John (US$ 850 mil), Maná (US$ 750 mil) y Jonas Brothers (US$ 600 mil) sumaron casi el 30% del presupuesto total para la contratación de artistas, fijado en cerca de un millón de dólares diarios. Así, seis millones de dólares es el dinero con el que se cuenta para contratos.

"Nosotros, sin embargo, no trabajamos pensando en un día específico, sino en la parrilla completa", comenta Catalina Yudin, productora ejecutiva del certamen, quien trabajó junto al director del Festival, Alex Hernández; el director ejecutivo de Chilevisión, Jaime de Aguirre; la productora general del festival, Carla Ruz, y Alicia Zaldívar, gerenta de gestión y desarrollo de la estación.

Cada noche, sin embargo, fue envuelta bajo un concepto. La última de ellas, como la "noche bailable". Pero en un comienzo iba a ser algo totalmente distinto: 31 Minutos estaba programado para el día 1 de marzo, o sea, anoche. Lo mismo Francisca Valenzuela. "Pero en general, los productores locales tenemos la disposición para sostener negociaciones más flexibles que los extranjeros", explica Alfredo Troncoso, productor involucrado en la organización del show de 31 Minutos en Viña. La contratación de Jorge González, finalmente, dio coherencia a una noche chilena, la sorpresa del certamen.

Casi a la Quinta


Un nombre que estuvo en la pelea para la última jornada fueron los mexicanos Café Tacvba, pero la balanza se inclinó hacia "el dúo de la historia" -así se hacen llamar Wisin & Yandel- cuando los boletos para la segunda noche, con Daddy Yankee y Romeo Santos, se agotaron. "Nos dimos cuenta que todavía teníamos a mucha gente que se había quedado fuera de esa noche y que necesitaba un número similar", explica Yudin.

La contratación de Wisin & Yandel se transó directamente en su oficina en Puerto Rico. Un proceso similar a lo que pasó con Daddy Yanke. "Siempre hemos estado en negociaciones con Chilevisión. Han venido a Miami. Son muy astutos", describe Mayna Nevarez, mánager del número uno del reggaetón.

Otros números arrastraban negociaciones por muchos años. Es el caso de Maná y Jonas Brothers, que según apunta el productor Jorge Ramírez, de Multimúsica -la empresa que ofertó esas bandas al Festival-, habían iniciado conversaciones hace "cerca de dos años".

Otros de los artistas que estuvieron a punto de pisar la Quinta Vergara esta noche fueron Jesse & Joy, pero no se llegó a puerto. ¿Y cómo se explica la inclusión del romántico Pablo Alborán en ese cuadro? "Porque es una fiesta. Y la fiesta tiene lentos", explica el director del evento, Alex Hernández.

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