Cristián Monckeberg: "Creer que la carrera presidencial ya está ganada es una locura"

CRISTIÁN mONCKEBERG

Presidente de RN llama a evitar el excesivo triunfalismo tras los resultados de las elecciones municipales, y pide fortalecer el trabajo para el próximo año. "No me cabe la menor duda que Ossandón finalmente va a aceptar la invitación a participar de una primaria", asegura.




A las 9.30 horas de este sábado está contemplado que comience el consejo nacional de RN, convocado por la mesa directiva para analizar los resultados de las elecciones municipales y proyectar el trabajo para las parlamentarias y presidenciales del próximo año. La instancia, además, será la última que enfrente el presidente de RN, Cristián Monckeberg, antes de las elecciones internas del 4 de diciembre, en las que espera ser reelecto.

¿Qué objetivos va a proponer la mesa directiva en el consejo?

Uno de los objetivos del consejo es delinear el futuro político del partido y de la coalición por los próximos dos años. Y ahí hay tres elementos clave: elegir un parlamento para gobernar; tener un programa de gobierno de verdad, influido por los partidos, y elegir un presidente de Chile. Esos son los tres objetivos a los cuales tenemos que abocarnos.

Tras dos años y medio en la presidencia de RN, ¿qué balance hace de la gestión de la actual mesa?

Creo que los resultados hablan por sí solos. La política se evalúa en las elecciones, y en la municipal la ciudadanía habló por sí sola. No puedo más que sentirme satisfecho con estos dos años y medio de gestión, porque se cumplió todo lo que dijimos que íbamos a hacer: modernizamos el partido con una nueva declaración de principios, constituimos una coalición que fue exitosa en las municipales y llevamos a RN a ser el partido más votado de Chile.

Su gestión tuvo un comienzo difícil, y muchas veces debió enfrentar duras críticas de los parlamentarios de su partido. ¿Cree que con estos resultados logró superar definitivamente estos cuestionamientos?

Nadie es monedita de oro. Yo no pretendo recibir aplausos de todo el mundo. Pero creo que en estos dos años y medio, y teniendo a la vista los resultados de las municipales, el balance fue positivo. Lo único que espero es volver a tener un voto de confianza de nuestros militantes, diputados y senadores, para los dos años que vienen. A mi juicio, creo que la mesa directiva cumplió con lo que se propuso en estos dos primeros años. Y ahora vamos por la segunda parte.

Tanto RN como la UDI han salido a destacar sus resultados municipales. ¿No cree que ha habido un exceso de triunfalismo en las celebraciones que ha tenido Chile Vamos?

Siempre es bueno celebrar después de un objetivo cumplido. Pero yo he visto señales de exitismo que llaman la atención. Los resultados de las elecciones debemos tomarlos con satisfacción, pero también con mucha humildad, porque hay muchos puntos débiles, partiendo por la abstención. Es bueno celebrar, pero sería prudente guardar las challas, guardar la banda presidencial, y trabajar pensando en que podemos ganar el gobierno, pero que no lo tenemos asegurado. Pero creer que la carrera presidencial ya está ganada es una locura. El peor consejero después de la municipal sería pensar que está segura la presidencial.

Más allá del triunfo en la municipal, algunos dirigentes como el senador Andrés Allamand han dicho que en Chile Vamos ha existido un déficit institucional y de propuestas. ¿Cuáles son los desafíos en ese sentido?

Debemos ser capaces de tener un programa de gobierno donde los partidos influyan en ideas. Yo ya estoy cansado de que se diga que la derecha no defiende sus principios. Vamos a ser majaderos para que nuestras ideas estén en ese programa de gobierno y nos diferenciemos de la izquierda. Creo que hay un déficit fuerte de ideas de la centroderecha. La gente sabe que la centroderecha, cuando gobierna, viene con buena gestión, eficiencia y crecimiento asegurado -ese es el "desde", ese es nuestro piso-, pero urge que el sector dé respuestas en materia de pensiones, educación, salud, innovación, tecnología, etc. Eso es clave para lograr los otros objetivos: elegir una buena lista parlamentaria y ganar la presidencial.

La lista encabezada por usted y Mario Desbordes es, hasta hoy, la única en competencia para la elección interna. ¿Cree que se pueda levantar otra lista que les compita?

Bienvenida sea la competencia. El partido está acostumbrado a competir. Yo lo único que puedo decir es que la mesa directiva planteó objetivos y se cumplieron todos a cabalidad. Hicimos una buena dupla con Mario Desbordes, vamos a seguir trabajando juntos esta segunda etapa, y espero que los militantes nos den su voto de apoyo.

Algunos militantes le han pedido al ex timonel Carlos Larraín que compita. ¿Ve posible que él levante una lista? ¿Lo ha conversado con él?

Carlos Larraín marcó un hito dentro de RN. Fue presidente por ocho años y él pavimentó fuertemente la posibilidad de que llegáramos a ser gobierno. Es justo reconocer los logros que han alcanzado los anteriores presidentes de partido, porque es un cargo muy ingrato. Yo no visualizo en los planes de Carlos Larraín iniciar una competencia cuando esta directiva y la dupla del presidente con su secretario general ha sido eficiente y exitosa.

Su directiva debió enfrentar la renuncia del senador Manuel José Ossandón. ¿Cree que lo va a poder convencer de que participe en la primaria presidencial de Chile Vamos, de modo de evitar que llegue a primera vuelta?

Sí. En la coalición hemos diseñado un cronograma que permita a quien lo estime pertinente participar en las primarias presidenciales. Existiendo más de un candidato con intenciones presidenciales, las primarias van a ser una decisión sin retorno. A mí no me cabe la menor duda que Ossandón finalmente va a aceptar la invitación a participar de una primaria abierta y legal, fiscalizada por el Servel. Para nosotros sería un lujo tener una elección primaria con un candidato militante de RN, pero también con dos candidatos que tienen el ADN de RN, como Piñera y Ossandón.

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