Primer ministro griego inicia campaña con promesas de austeridad

El primer ministro griego, Costas Karamanlis, inició ayer su campaña para ganar contra todas las posibilidades una elección anticipada, prometiendo dolorosos recortes al gasto público que ya generaron la oposición de los sindicatos.

En un discurso anual sobre economía, el actual líder conservador prometió que si gana su tercer mandato en casi seis años, congelaría los pagos y contrataciones del sector público y continuaría privatizando firmas estatales para reducir la deuda pública.

"Estas medidas serán implementadas, sin que importe cuántos grupos se opongan a ellas", dijo Karamanlis en la apertura de la Feria de Comercio de Tesalónica. Los discursos anuales de los primeros ministros griegos en Tesalónica usualmente se enfocan en distribución social.

El discurso fue precedido por airadas protestas de sindicatos, en las que más de 10 mil personas se reunieron en las calles de la segunda mayor ciudad de Grecia para oponerse a la política económica del gobierno. Las protestas fueron mayormente pacíficas.

"Decenas de miles de trabajadores protestaron, buscando aumentos de los salarios y la anulación de las privatizaciones", dijo en una declaración el principal sindicato Gsee.

Afectado por escándalos y el primer estancamiento económico de Grecia en 16 años, Karamanlis convocó esta semana a una elección anticipada en medio de su segundo mandato, para que su partido Nueva Democracia pudiera tomar medidas duras para frenar la caída de la economía.

La principal fuerza de oposición, el partido socialista Pasok, tiene una ventaja de más de 6 puntos porcentuales en las encuestas sobre Nueva Democracia, que ha perdido apoyo en medio de un creciente desempleo y un ajuste crediticio para las empresas.

El expositor de la feria Symeon Gazes, quien construye casas prefabricadas, dijo que su negocio había bajado en la mitad desde el inicio de la crisis. "Nuestra situación es dramática, hay mucha decepción con el Gobierno", afirmó.

Una serie de escándalos, los peores disturbios en Grecia en décadas y los incendios forestales cerca de Atenas el mes pasado asestaron otro golpe a Karamanlis, quien llegó al poder en el 2004 y fue estrechamente reelegido en el 2007 por promesas de luchar contra la corrupción y hacer más eficiente la gestión.

Karamanlis, de 52 años, privatizó compañías estatales como la aerolínea de bandera Olympic Airlines y elevó los impuestos indirectos para tratar de ajustar el creciente déficit fiscal del país.

Karamanlis también prometió el sábado continuar con las privatizaciones si es reelegido, apuntando a la segunda empresa de aguas de Grecia Thessaloniki Water, a la productora de níquel Larco, al monopolio de gas natural DEPA y al casino Mont Parnes cerca de Atenas.