Por primera vez en cuatro años, Santiago no ha presentado días de alta contaminación

El invierno pasado, a esta misma fecha, la Región Metropolitana ya registraba tres días de emergencia ambiental por contaminación del aire. Se trató de la mayor cifra de episodios críticos desde 2014, cuando el Ministerio de Medio Ambiente inició la medición de los niveles de Material Particulado Fino (MP 2,5) en la cuenca.

Esta vez, a diferencia de los últimos cuatro años, el panorama ha cambiado: la autoridad informó que no ha habido episodios con grave contaminación en lo que va de este año, por lo que la evaluación es positiva.

El balance oficial indica que en 2016 se habían presentado 16 alertas, cinco preemergencias y tres emergencias, lo que implica una calidad de aire peligrosa para la salud. Este año, en cambio, sólo se han producido 15 alertas, pues, si bien se declaró una preemergencia, esta no se constató.

El ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena, dice que hay tres factores que podrían incidir en este escenario. Uno de ellos es el aumento de días con lluvias, en comparación con el año pasado, "lo que genera ventilación y dispersión de las emisiones", dijo.

Además del factor meteorológico, Mena añadió que también se percibe una rebaja de las emisiones de MP 2,5, pues la población utiliza una menor cantidad de leña para la calefacción: "Pensamos que las personas se han cambiado a combustibles limpios",

El ministro agregó que esto se ha podido analizar a partir del "dron fiscalizador" del ministerio, que ha captado muy pocas imágenes de zonas donde se utiliza este combustible, y que los conductores han tendido a renovar sus automóviles por otros con filtros para rebajar la polución.

Sin embargo, el académico e investigador en calidad del aire de la U. de Santiago, Patricio Pérez, entregó una visión menos optimista. "La tendencia se ve a largo plazo, un par de años es muy poco para poder dar una visión de que todo ha mejorado sustancialmente". Agregó que en estos resultados incide el factor de ventilación: se han registrado sólo tres días de mala ventilación en la capital (lo que se relaciona con la llegada de sistemas frontales), mientras que el año pasado fueron 21 jornadas de ese tipo. "No es posible decir que hay menores niveles de MP 2,5, pues no hay estudios", cerró.

La situación de Santiago contrasta con lo que se vive en Coyhaique, donde este año se han registrado 21 emergencias ambientales. Se trata de la mitad de los episodios complejos contabilizados el año pasado a esta fecha, pero su frecuencia sigue siendo preocupante.

El gobernador local, Cristián López, sostuvo que la reducción estaría relacionada a los sistemas frontales y que, pese a ello, los episodios se han sucedido pues "se han producido las mayores nevazones en seis años, por lo que aumenta el consumo de leña para calefaccionar los hogares".

Como medida del plan de descontaminación local, se ha distribuido a los vecinos tres mil equipos de calefacción. Además, López aclara que, hasta ahora, no se ha visto un alza de las afecciones respiratorias en el hospital, "pues la gente, en general, no sale de las casas a exponerse".

En tanto, las comunas que han tenido mayores niveles de esmog son Temuco y Puerto Montt, ambos con 13 días de emergencias ambientales.