Renuncia vicepresidenta PPD con dura autocrítica por derrota electoral

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"Impulsamos estrategias que fueron insuficientes para enfrentar el proceso político y social que estamos atravesando", dijo Verónica Pinilla.




"Sobredimensionamos el poder de las transformaciones sociales declaradas y la forma cómo éstas se llevaron a cabo, generamos divisiones innecesarias al interior de la coalición, no nos preparamos oportunamente para implementar la ley de cuotas (...), impulsamos estrategias que fueron insuficientes para enfrentar el proceso político y social que estamos atravesando".

Esas son algunas de las reflexiones que, a modo de mea culpa, formuló Verónica Pinilla en la carta con la que ayer presentó su renuncia a una de las vicepresidencias del PPD.

La dimisión de la dirigenta se da en medio de las recriminaciones instaladas en ese partido tras el fuerte revés electoral que la colectividad sufrió en las parlamentarias del 19 de noviembre (en marzo bajará su representación en la Cámara de Diputados desde 14 a ocho escaños) y la derrota de Alejandro Guillier en la presidencial.

El resultado activó en el PPD un intenso debate interno sobre la necesidad de "reinventar" el partido y llevó a la directiva a adelantar las elecciones internas y poner su cargo a disposición del consejo nacional de la tienda, convocado para el 12 de enero.

Pinilla argumentó en su carta que le resulta "ineludible" hacerse "cargo y responsable política de los resultados electorales obtenidos por nuestro partido".

"Estoy convencida de que nuestros militantes, así como la ciudadanía, esperan que actuemos bajo el paraguas de la ética de la responsabilidad, donde asumimos con coraje los costos de nuestras decisiones y generamos las condiciones para los cambios imperativos", agregó.

En el PPD no descartan nuevas renuncias a la mesa directiva liderada por Gonzalo Navarrete.

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