Trump nomina a gobernadora como influyente embajadora

Designada por el Presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, como futura embajadora ante la ONU, la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, era poco conocida a nivel nacional hasta que un tiroteo en su estado le valió protagonismo.

La masacre en una histórica iglesia negra en Charleston en junio de 2015 dejó al descubierto algunas de las tensiones raciales que aún persisten en Carolina del Sur, que en 1860 se convirtió en el primer estado en separarse de Estados Unidos antes de la Guerra Civil.

Hija de inmigrantes indios, Haley se posicionó con firmeza contra el tiroteo perpetrado por un joven blanco e inició una campaña para remover de todos los edificios públicos del estado la bandera confederada, vista por muchos como un símbolo racista.

Haley, de 44 años, que debe ser confirmado por el Senado, fue criada como una sij y es la primera integrante de una minoría incluida en el equipo de gobierno del magnate, conformado hasta ahora sólo por funcionarios blancos. Haley se define como cristiana.

Durante la campaña, Haley fue crítica de Trump y en las primarias republicanas apoyó primero al senador por Florida Marco Rubio y luego al senador Ted Cruz.

Su nombramiento podría ayudar a aliviar las tensiones después de una campaña dividida en la que Trump atacó violentamente a los inmigrantes mexicanos, a los que acusó de violadores y criminales; amenazó con prohibir el ingreso de musulmanes; y enfrentó acusaciones de varias mujeres por acoso sexual y abuso.

Haley se ganó el apoyo de la ex gobernadora de Alaska Sarah Palin y llegó a la gobernación del estado en 2010. Sin embargo, su designación desatará críticas porque carece de experiencia en política exterior.

La designación de Haley se suma a la de otra mujer, Betsy DeVos, que asumirá como secretaria de Educación. Hasta ahora el presidente electo había sido criticado por designar sólo a hombres blancos en su futura administración, además, el ex precandidato presidencial afroamericano Ben Carson sugirió que también aceptaría un puesto.

La futura secretaria de Educación integra una reconocida familia de la "realeza de Michigan", según el diario The New York Times y su hermano fundó la polémica empresa de seguridad Blackwater. Heredera de la fortuna de Amway, la familia DeVos es una de los principales donantes del partido Republicano.