Cordero defiende regularización de migrantes ante dardos de la oposición y asegura que no hay una estrategia de popularidad tras la iniciativa
Durante la comisión de Gobierno Interior, los diputados José Carlos Meza (republicanos) y Cristián Labbé (UDI) fueron unos de los más criticos de la iniciativa del gobierno y de la gestión del Ejecutivo en migraciones. De hecho, Meza los acusó de mentir y hacer trampa.
La tarde de este martes la comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados sesionó para analizar los alcances de un eventual proceso de regularización de inmigrantes que se encuentra estudiando el Ejecutivo.
A la instancia asistieron el subsecretario del Interior, Luis Cordero, el director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Thayer Correa, entre otros.
Durante la sesión, el subsecretario Cordero expuso una serie de antecedentes en materia de migraciones, por ejemplo, los cuatro procesos de regularización de extranjeros que se realizaron con anterioridad en nuestro país.
Además, abordó la “confusión” que se produjo con el trámite de enrolamiento de extranjeros realizado el día de ayer en el estadio Víctor Jara en Estación Central. Y es que, voces de oposición aseguraron que la gran aglomeración registrada en dicho evento respondía al “llamado” generado por el estudio del gobierno sobre una eventual regularización acotada.
Luego, fue el momento de responder preguntas. Ahí, el diputado José Carlos Meza (Republicanos) consultó: “¿Este es el primero de varios (procesos de regularización) o es el único? ¿Nos van a volver a mentir con este tema? Lo pregunto directamente porque aquí el gobierno vino a decirnos que el empadronamiento no era regularización. Se lo preguntamos varias veces y la propia ministra Tohá nos dijo que no era regularización y resulta que era regularización. Entonces, yo a este gobierno no le creo porque este gobierno nos viene a hacer trampa acá y con tramposo uno no puede hablar (...) aquí se nos mintió y se nos hizo trampa”.
Tras su declaración, la diputada Camila Musante (Ind.-PPD) intervino para solicitar que se borrara en el acta la palabra “tramposos para hacer referencia al gobierno, y mentirosos también”.
Después, fue el diputado Cristián Labbé (UDI) quien reiteró los dichos de su par republicano. “Yo quiero reafirmar algo. No le creo a este gobierno y no me pidan que la saque porque no le estoy insultando. No le creo a este gobierno”.
“Es bien técnica la presentación del Ejecutivo, pero hay algo que este gobierno hace bastante bien, que es enrredarnos con los números. Y yo entiendo perfectamente bien que el gobierno, a lo mejor, quiere tomar estos números para poder blanquear la decisión que tomaron y, sobre todo, lo que vimos que pasó en Meiggs. Es un desastre y aún así le echan la culpa a cualquiera. Este gobierno no ha hecho ni una autocrítica en materia de migración”, agregó el gremialista.
Por último, el diputado Miguel Becker (RN) dijo: “No nos mintieron, pero tengo la sensación de que hay cifras que son engañosas. Yo no soy experto en este tema, pero también las cifras estas de que parece ser un buen negocio tener extranjeros acá, no tienen en consideración los miles de millones de pesos que ha gastado el gobierno, las municipalidades, los particulares para defenderse del crimen organizado y otros”.
La respuesta de Cordero
Ante la serie de interrogantes, el subsecretario contestó: “Algunas de las críticas que acá se han formulado tienen que ocupar expresiones tales como engaños, mentiras. Se ha referido directamente alguno de ustedes a la ministra Tohá, y yo la primera precisión jurídica que yo debiera hacer en esta sesión para responder cada una de sus preguntas conforme a la legislación chilena, es que la autoridad migratoria sea el subsecretario del Interior, no la ministra del Interior. Aclarado ese punto, creo que es relevante decir que yo entiendo entonces que las interpelaciones son a quien ejerce este cargo y no a la ministra del Interior”.
“En segundo lugar, si me permite hacerme cargo de la pregunta, a mí se me han interpelado una serie de situaciones, hay algunas suposiciones respecto a las cuales a mí me parece que es relevante hacerse cargo y porque el subsecretario del Interior es el que habla es porque conforme a la ley es el que tiene la atribución, pero creo que también es relevante, sobre todo para quienes han formulado una visión crítica que yo respeto mucho, es que la estrategia más fácil del gobierno es no haber dicho nada”, continuó.
Dicho eso, reiteró: “Les quiero decir que la estrategia más fácil del gobierno es no haber dicho nada porque probablemente muchos de ustedes han visto los números que aparecen en materia de inmigración. La inmigración divide. En segundo lugar, la inmigración supone mayor criminalidad, eso es habitualmente lo que suele suceder en los discursos. La inmigración suele ser una situación, un criterio radiactivo para la política. La mejor decisión del gobierno, si hubiera mirado solo esto en términos electorales, es guardar silencio, no decir nada y dejar este empadronamiento ahí y que lo resolviera la próxima administración. Esa es la manera más fácil de resolverlo”.
“Pero lo he dicho desde el principio, he tratado de explicar los argumentos de política pública que están detrás de esto mismo. Yo creo que podemos tener muchas diferencias, pero la pregunta de qué hacer con la inmigración irregular en Chile y particularmente con las personas que se empadronaron voluntariamente por el llamado del Estado, es una pregunta que tenemos que resolver. Y yo, por cierto, quiero hacer esa advertencia porque usted me comprenderá que abrir esta discusión pública, solo ha granjeado críticas y casi ningún apoyo. Entonces, si alguien quiere suponer en esta comisión que detrás de esto hay una estrategia de popularidad, le quiero decir que no hay ninguna porque lo que la evidencia ya muestra es que es todo lo contrario”, cerró el subsecretario.
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