Los roces que marcan la recta final del traspaso de mando entre el gobierno de Boric y la administración de Piñera
La relación entre la actual administración del Presidente Sebastián Piñera y del próximo mandatario, Gabriel Boric, ha tenido varios "vaivenes" que han generado enfrentamientos. Aunque desde ambos sectores destacan que el traspaso de mando que concluirá hoy con el arribo a La Moneda de Boric se ha realizado en buenos términos, reconocen que el tono se ha ido endureciendo en los últimos días.
Aunque quieren resaltar que el traspaso de mando se concluye de una manera exitosa, en el actual gobierno del Presidente Sebastián Piñera acusan que la futura administración de Gabriel Boric adoptó un tono confrontacional que ha tensionado en las últimas horas la relación entre ambos sectores.
En Palacio generaron molestia los dichos que vertió esta semana la futura titular de la Segegob, Camila Vallejo (PC), que calificó al de Piñera como “el peor gobierno de la historia”.
“Comparto que ha sido el peor gobierno de la historia. Hemos tenido, eso sí, un proceso de traspaso de información muy republicano, pero no podemos esconder las críticas a su gestión (...). Los problemas que nos deja el gobierno de Piñera serán nuestros problemas y nos debemos hacer cargo, pensando en nuestro país y el futuro. Así que harto aprendizaje para poder avanzar con esta mala experiencia”, dijo Vallejo el martes en Canal 13.
El gobierno no se quedó callado y respondió con dureza. Mientras el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, señaló que cuando se está más cerca del poder hay que ser más humildes, el subsecretario de la Segpres, Máximo Pavez, apuntó directamente contra la nueva vocera. “Quiero decirle a la futura ministra Camila Vallejo, que trató al actual gobierno como el peor gobierno de la historia, que se haga cargo de los nombramientos que hizo el futuro Ejecutivo”. Esto, en alusión a la investigación judicial que enfrenta el próximo ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela.
En La Moneda, las palabras de Vallejo generaron malestar, porque son ad portas del cambio de mando y así se lo habrían hecho saber a la próxima administración. Pero en el Ejecutivo desdramatizan el escenario y aseguran que la relación entre gobierno entrante y saliente ha tenido “vaivenes”.
En esa línea, agregan también que ha habido algunos acercamientos que han contribuido a “calmar las aguas”. Uno de ellos fue una reunión que se realizó este jueves entre el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, junto a Izkia Siches por un tema de la Onemi.
Asimismo, en el Ejecutivo destacan el tono conciliador del próximo subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien calificó de “republicano” el traspaso de mando.
En Palacio también se tomó nota de las declaraciones del futuro ministro de la Segpres, Giorgio Jackson, quien el miércoles, en entrevista con The Clinic, cuestionó las gestiones del gobierno frente a la delincuencia. “En el 2009 dijeron que se iba a acabar la fiesta de los delincuentes. Celebraron que habían subido las penas, que estaban teniendo mano dura, pero la gente no se ha sentido más segura en su vida cotidiana. Entonces, como estamos en un momento donde las instituciones están tan desprestigiadas, creo que las personas quieren que uno les diga la verdad. Y eso exige explicar y elevar el nivel de complejidad de las soluciones para los problemas que estamos viviendo”, dijo el futuro ministro Segpres.
Los roces públicos entre la administración de Piñera y los personeros del futuro gobierno de Boric contrastan con la relación “republicana” que han logrado cultivar Piñera y Boric, según afirman en Palacio, y que se ha visto reflejada en una serie de conversaciones privadas entre ambos, según publicó La Tercera PM.
Aun así, el Presidente en su última cadena nacional del jueves en la noche cuestionó a la actual oposición que desde hoy será gobierno. Sin precisar a quiénes exactamente se refería, el Mandatario manifestó que “más allá de nuestros errores o falencias, que los hubo, la acción del gobierno encontró en demasiadas ocasiones una implacable obstrucción de una parte de la oposición y, también, muchas veces, críticas que nos parecieron injustas, porque no consideraron las dificultades del momento”.
Semanas antes, Piñera también se vio enfrentado a la próxima ministra del Interior, Izkia Siches, a raíz del estado de excepción en la Macrozona Sur del país. En la oportunidad, el Mandatario la emplazó a “informarse bien” luego de que la futura secretaria de Estado indicara que la medida ha provocado un aumento en los hechos de violencia.
El gobierno saliente con el entrante también se vieron tensionados cuando Piñera sorprendió hace unos días con el anuncio de la extensión del IFE laboral. En esa ocasión, el próximo titular de Hacienda, Mario Marcel, hizo sentir la molestia del futuro gobierno y criticó que se comprometieran recursos públicos de la nueva administración.
Con todo, en La Moneda no descartan que al llegar al gobierno algunos de los nuevos secretarios de Estado insistan con los cuestionamientos a la actual administración y anuncien sumarios. Por lo mismo, Piñera y gran parte del equipo ministerial están preparados para defender su gestión.
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