Con banderas y carteles, a pie o en auto, sus partidarios llegaron a celebrar al frontis de la Municipalidad de Puente Alto. Los automovilistas hacían sonar sus bocinas y la gente saltaba festejando la que acaso sea la gran sorpresa de la elección municipal: el triunfo del candidato independiente Matías Toledo. Fue una victoria con un sabor especial. Con el 51,6 % de los votos, según datos del Servel, Toledo no sólo superó con holgura a Karla Rubilar, su principal contrincante, quien obtuvo el 37,2%, y quien representaba la continuidad de la administración del alcalde Germán Codina, sino que logró algo con contornos de epopeya: después de 24 años, Toledo le arrebató a la derecha el dominio de la comuna más poblada de Santiago, con cerca de 650 mil habitantes, que estaba en manos de ese sector desde la elección de Manuel José Ossandon, en el año 2000.

Alrededor de las 21.30, el alcalde Germán Codina y Karla Rubilar reconocieron la derrota. Entonces la alegría estalló en el comando de Toledo, ubicado a solo unos pasos del municipio. Minutos después, acompañado de su equipo y de adherentes como la diputada Ana María Gazmuri, el candidato triunfador valoró el resultado:

“No hay fórmula. Hoy día nosotros estábamos contra todo, estábamos subiendo un cerro, un joven de una villa popular, de una casa de subsidio básico, y enfrentándose contra el oficialismo, contra la derecha, muchas veces nefasta. La verdad es que tuvimos mucha persecución política, muchos ataques, pero ya estamos contentos”, dijo.

El triunfo de Toledo fue la sorpresa porque levantó su candidatura al margen del oficialismo y sin apoyo partidario: reunió 6.500 firmas para inscribir su candidatura. Lo mismo hizo en 2021, cuando obtuvo el 32% de los votos, superando a los dos candidatos de la izquierda. Por lo mismo, esta vez esperaba que la coalición de gobierno le prestara apoyo, pero los partidos se alinearon detrás de la candidatura del PS Luis Escanilla.

“Ha sido un trayecto complejo, porque muchas veces estuvimos en la soledad política, de ser los únicos que estaban trabajando en el territorio, mientras muchas organizaciones y partidos políticos se fueron a trabajar con sus grupos o a universidades, pero ha dado frutos poner por sobre todo la dignidad de los vecinos y las vecinas”, dijo anoche.

Ingeniero en Administración Municipal, de 35 años, Toledo es cofundador de la Coordinadora Social Shishigang junto a Ignacio Araneda y al cantante Pablo Chill-E. A través de ella, realizan actividades sociales y culturales en la comuna. Ese trabajo fue la base que le permitió construir una campaña exitosa, si bien anoche se refirió a un tarea colectiva más amplia.

“Trabajamos para este momento, llevamos más de 18 años trabajando en la calle. Muchas veces los medios nos reducen a una organización que es la Coordinadora Social Shishigang, pero acá tenemos integrantes de Salud en tu Comunidad, profesionales del área de la salud, abogados, trabajadores sociales, de un montón de organizaciones que han estado desplegados todo este tiempo trabajando con más de 200 juntas de vecinos”, dijo.

Acompañado de sus colaboradores más cercanos, el candidato votó en el colegio Raúl Silva Henríquez. No fue un proceso sencillo, por la cantidad de seguidores que lo rodearon y por los equipos de prensa presentes en el local de votación. Fue tal el desorden, que personal del Ejército intervino para que pudiera votar.

Confiado en los resultados, Toledo pasó la mayor parte del día en su departamento con su esposa e hijo, para posteriormente dirigirse hasta su comando. Ya entonces, entre su equipo se respiraban aires de triunfo, de modo que comenzó a programarse la celebración en el frontis del municipio.

Entre los saludos de felicitaciones, Toledo recibió el llamado del Presidente Gabriel Boric, si bien en algún momento criticó al Mandatario por no haber sido capaz de ordenar la coalición. Y aunque recibió apoyo de partidos oficialistas de Puente Alto, fue muy crítico de los partidos. Pese a ello, de igual manera concurrió hasta el Palacio de La Moneda, llegando pasadas las 12 de la noche, lugar donde ya habían arribado algunos alcaldes triunfantes del oficialismo.

“Que hoy día exista un candidato oficialista en Puente Alto no responde tanto a los intereses de los puentealtinos y puentealtinas, sino a la cocina nacional que hacen los partidos para distribuirse las municipalidades. Pero nos sentimos supercómodos con la independencia”, dijo Toledo a La Tercera en agosto pasado.

Entonces criticó al Presidente Gabriel Boric: “No fue capaz de ordenar”. Y lanzó un vaticinio que anoche acabó por cumplirse: “Vamos a ganar esta elección y los partidos van a volver a golpear nuestra puerta, como lo hicieron hace tres o cuatro años para pedirnos apoyo, tanto para las diputaciones como para la presidencial”.

Desde la independencia, su candidatura ganó adhesiones, creció entre las intenciones de voto y los partidos oficialistas de la comuna fueron sumándose, como el Partido Liberal, el Partido Comunista y el Frente Amplio. Pero él mantuvo sus críticas hacia el PS: “El Partido Socialista es el gran responsable de la división de voto en Puente Alto”, dijo en entrevista con El Desconcierto.

Entre quienes ayer se encontraban en el comando estaba la diputada del PC Daniela Serrano, quien lamentó que no se logró unidad entre las fuerzas progresistas. Destacó la independencia de Toledo y dijo que la lección que deja es “entender que hay que darles espacios a otras fuerzas”.

La victoria de Matías Toledo puso fin a 24 años de alcaldes de Renovación Nacional (RN): desde la elección de Manuel José Ossandón en 2000 y quien se mantuvo por tres períodos, a las administraciones de Germán Codina (2012, 2016 y 2021).

En esta elección, la alcaldía fue un punto de tensión al interior de RN. Karla Rubilar se desempeñó como coordinadora social del gabinete del alcalde Codina entre abril de 2022 y enero de 2024, y fue apoyada por él para sucederlo en el cargo, pero su postulación fue resistida por el senador Ossandón, quien respaldaba a su sobrino, Felipe Ossandón.

La relación entre Codina y Rubilar tuvo un momento de crisis cuando el alcalde reveló que la candidata lo había bloqueado en WhatsApp. Ella respondió que se encontraba en un momento complejo y necesitaba tiempo. Finalmente, Codina y Rubilar limaron asperezas y ella se convirtió en la candidata de continuidad.

“La ciudadanía habló”, dijo anoche al reconocer el triunfo de su rival, acompañada del alcalde Codina. Admitió también que las controversias internas le jugaron en contra.

“Las peleas nunca han sido bien evaluadas por la ciudadanía. Nos equivocamos en pelear dentro del sector, dentro de los propios, dentro de los mismas, sin duda. Hoy otro candidato, con ideas muy diferentes, va a llegar al sillón municipal de Puente Alto. No es fácil gobernar esta comuna y la verdad es que yo creo que se necesita mucha experiencia (...) No tiene un desafío fácil, le deseo lo mejor y espero que le vaya bien”, dijo minutos antes de que los adherentes de Toledo comenzaran a tomarse el frontis del municipio.

A su vez, el candidato triunfador dijo que tomaba la victoria con esperanza. “Han sido años de abandono en nuestros sectores. Años de microbasurales, años de abandono en todo tipo de materias, 25 años con filas en las afueras de los Cesfam”, expresó. “Se nos viene un desafío superimportante que hoy día es devolverles la dignidad a nuestras vecinas y vecinos”, agregó.

Y finalizó: “Ahora me hace sentido porque nos decían octubristas: porque ganamos en octubre”.