El pasado jueves 7 de abril el Presidente Gabriel Boric anunció el plan “Chile apoya”, donde los principales ejes apuntan a congelar las tarifas del transporte público, la contención de los precios de los combustibles, la extensión del IFE laboral hasta septiembre, un IFE de amplia cobertura en caso de cuarentenas extensas, aumento del salario mínimo a 400 mil pesos líquidos durante este año, subsidio protege y el apoyo a las pymes.

Asimismo, durante la mañana de este domingo, el mandatario se reunió con su gabinete en el Barrio Yungay, comuna de Santiago, para hacer un balance del primer mes de gobierno y también para acordar la propuesta de la gira nacional “Chile Apoya”.

Fue en aquella instancia en que el jefe de Estado reconoció que su gobierno “despegó con turbulencias”.

En este contexto, la ministra de Desarrollo Social y Familia, Jeanette Vega afirmó en Estado Nacional que “yo creo que ha sido una instalación difícil porque estamos en un momento complicado: el país tiene problemas económicos derivados de una crisis global y tenemos una Convención Constituyente que es un proceso que demanda esfuerzo, aunque eso no significa que estamos interviniendo”.

Agregó que “ha habido errores que hemos cometido algunos, en parte por la inexperiencia y también porque cuando uno se instala siempre se cometen errores. Todos los gobiernos en la instalación inicial comenten errores”.

Según las palabras de la secretaria de Estado, el plan Chile Apoya busca reactivar al país y generar las condiciones para el empleo y las inversiones, considerando un foco de la reactivación en aquellos que “se están quedando atrás” y evita que la brecha de rezagados siga creciendo con el transcurso del tiempo.

Sobre los resultados o cuando estos se podrían ver, la titular de la cartera señaló que “vamos a empezar a ver resultados en distintos momentos. Por ejemplo, hay medidas que se implementan ahora ya y otras en el segundo semestre”.

Asimismo, precisó que se espera la creación de 500 mil empleos formales durante este año con enfoque en las mujeres y los adultos entre los 50 y 55 años de edad, cuyo fin es incentivar la contratación de este grupo.

En ese sentido, la ministra aseveró que una de las decisiones para determinar estos focos se basan en que “hay muchas mujeres que no se formalizan, pensando en que pueden perder beneficios ligados al registro social de hogares (..). En el caso de los adultos mayores (50-55), se debe a que en algunas ocasiones no encuentran empleos porque están sobrecalificados y no hay espacios”.

Desde que se iniciaron las conversaciones para evaluar la posibilidad de un nuevo retiro de los fondos de pensiones, el Ejecutivo siempre ha mantenido su postura contraria a esta medida.

Sin embargo, la ministra Vega enfatizó en que la presentación del plan “Chile Apoya” no tiene alguna relación con aprobar o no un nuevo retiro, sino con una forma de reactivar al país de una manera rápida y con enfoque en aquellos que se han quedado atrás.

Sobre su opinión al quinto retiro, la titular de la cartera de Desarrollo Social fue enfática en recalcar que “el quinto retiro es una mala política, puede que haya sido en algún momento un retiro una posibilidad cierta. Ahora estamos en un momento de la pandemia donde la situación no está grave y podemos volver a trabajar. Además, estamos con la inflación más alta que hemos tenido hace tiempo”.

Además agregó que “si hacemos un quinto retiro, vamos a aumentar la inflación. Vamos a sacar plata, y esa plata básicamente se nos va ir en inflación y en un sobrecalentamiento de la economía”.

Por otra parte y considerando el efecto inflacionario, sostuvo que esta se ha visto en el aumento de las tasas, en los precios de los alimentos y también en la dificultad para acceder a un crédito hipotecario.

Finalmente, la ministra de Desarrollo Social enfatizó en que hay una responsabilidad de todos en estos momentos, y en particular de los parlamentarios que representan a la ciudadanía.