¿Pacto sin el PC? DC y Partido Radical se reúnen de cara a elecciones 2025

La mañana del jueves, el presidente y la secretaria nacional de la Democracia Cristiana (DC), Alberto Undurraga y Alejandra Krauss, respectivamente, llegaron hasta la sede del Partido Radical, en la intersección de las calles París y Londres, en el centro de Santiago. Lo hicieron con una idea en mente: comenzar a delinear un pacto electoral de cara a las elecciones presidenciales y parlamentarias de 2025.

El presidente de la DC ya fijó una posición con respecto a los comicios que se aproximan. La semana pasada, en entrevista con La Tercera, Undurraga dijo que “el Partido Socialista (PS) tiene que definir si se atrinchera con el Partido Comunista (PC) o vira hacia la moderación con la DC”, y reconoció que para él “sería un error si se impone lo que ha expresado el Presidente”, en referencia al llamado que Gabriel Boric hizo a su alianza de gobierno -que no incluye a la Falange- a conformar una lista única.

El emplazamiento de Undurraga logró remecer las aguas al interior del oficialismo: socialistas y comunistas rechazaron enérgicamente sus dichos. Por lo mismo, el acercamiento con los radicales es significativo: se trata de uno de los cuatro integrantes del Socialismo Democrático, coalición que también incluye al PS, el PPD y los liberales, y con la que la DC tiene especial interés en pactar en consideración de su pasado común en la Concertación.

Tras el encuentro, el diputado Undurraga afirmó que “le hicimos nuestro planteamiento de unidad estratégica (al Partido Radical), con dos listas parlamentarias y dos candidaturas presidenciales, y percibimos buena recepción”.

Por su parte, el líder de los radicales, Leonardo Cubillos, sostuvo que “ambos partidos consideramos que la unidad del progresismo es fundamental. Si no, los resultados para enfrentar a la derecha se complejizan. Es unidad estratégica, independiente de que sea una o dos listas. Aquí hay que mirar el mejor resultado (electoral)”.

Así, el timonel no cerró la puerta a ignorar a Boric y competir en más de un pacto, aunque siempre en unidad. “La DC debe ser un componente imprescindible dentro de esta alianza”, sentenció. Los radicales ya hicieron caso omiso a una solicitud del Presidente en las elecciones pasadas. Empujaron candidaturas por las gobernaciones regionales de Antofagasta y O’Higgins, pese a que el Mandatario fue explícito, en un comité político, en privilegiar la reelección de las autoridades en ejercicio.

El líder de los radicales aprovechó de hacer presente que el 12 de diciembre los partidos de la alianza tendrán una jornada de trabajo dedicada particularmente a los desafíos electorales de 2025. Esa, se prevé, será el puntapié inicial de la negociación del próximo año.

Esta semana, el PC agregó un nuevo elemento a la discusión sobre eventuales pactos. El miércoles, el presidente de los comunistas, Lautaro Carmona, junto al histórico dirigente Juan Andrés Lagos, se reunieron con parte de la directiva del Partido Popular, colectividad no oficialista -pero de izquierda- fundada por varios exmilitantes de Comunes. Entre ellos, cercanos a Karina Oliva.

“Reunión en el marco de ciclo de conversaciones con distintas fuerzas de izquierda y progresistas con premisa de la unidad más amplia. Analizamos escenario político, construcción de alianzas”, se lee en la publicación que subió el PC a sus redes sociales junto a los dirigentes del Partido Popular. Desde la tienda encabezada por Carmona adelantan que buscarán tener acercamientos con otros colectivos que no pertenecen a la alianza de gobierno, como el Partido Igualdad y el Humanista.

Algunos en la alianza advierten que esos acercamientos son complejos, en consideración de que solo al interior del oficialismo ya son ocho las colectividades las que tendrán que sentarse a la mesa a negociar. Sumar actores, creen, solo hará más cuesta arriba llegar a una lista unitaria como solicitó el Presidente.

El diputado Undurraga afirmó que ese gesto de los comunistas con el Partido Popular “refuerza la convicción de dos candidaturas presidenciales distintas”. Sobre ese punto, Cubillos sostuvo que “cada partido tiene el legítimo derecho de juntarse con quien estime conveniente”.