Piñera busca el tono en medio de la crisis

"El tono del Presidente, y creo que la gente lo ha visto, ha ido cambiando de forma importante. Todavía nos cuesta que la ciudadanía lo perciba. Decir lo contrario sería faltar a la verdad". Con estas palabras, la vocera de gobierno, Karla Rubilar, daba cuenta este miércoles de otra complejidad que ha debido enfrentar el gobierno en medio de la crisis: cómo es recibido el discurso del Mandatario y de otras autoridades de La Moneda.

La preocupación instalada en Palacio radica en las dificultades que han tenido para que el mensaje y el tono de Piñera "calen" en las personas y permitan aplacar, en alguna medida, el descontento ciudadano, algo que -reconocen en el gobierno- ha sido complejo en medio de un ambiente de desconfianza hacia las instituciones, lo que también ha repercutido en la figura presidencial. De hecho, la última encuesta Cadem da cuenta de apenas un 13% de respaldo a Piñera.

Al inicio de la crisis, el Jefe de Estado apelaba, principalmente, a restablecer el orden, y luego, señaló que "estamos en guerra", recrudeciendo las críticas en la ciudadanía y la oposición. Además, continuó respaldando la gestión de Carabineros y las FF.AA., mientras que, en paralelo, aumentaban las denuncias por presuntas violaciones a los derechos humanos.

Cinco días después, el Mandatario pidió perdón por no haber reconocido a tiempo las demandas ciudadanas y anunció 15 medidas. Ese día, dicen en La Moneda, fue un "punto de inflexión" en el discurso presidencial, ya que intentó conectar con las personas, una línea que se ha esforzado en mantener, pero que ha tenido traspiés. Así, por ejemplo, en medio de cuestionamientos al gobierno por no condenar enérgicamente las salidas de protocolo de uniformados, el 26 de octubre Piñera pidió un minuto de silencio por los fallecidos en manifestaciones y señaló: "Han significado una pérdida de vidas inocentes, algunas". Sus dichos generaron molestia en redes sociales.

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Presidente visitó, junto al ministro Blumel, a un paramédico lesionado con un perdigón de goma, según informó el gobierno.[/caption]

Junto con eso, el discurso del gobierno comenzó a incorporar la convicción de que el Presidente y el Ejecutivo están comprometidos con la protección de los DD.HH., pero haciendo hincapié en que los carabineros tienen derecho a defenderse. Así, el Presidente fue a visitar el martes a dos carabineras heridas en manifestaciones, mientras que este miércoles hizo un giro y anunció que iría a ver a las víctimas que han sufrido lesiones en manos de uniformados. Así, por la tarde visitó a un paramédico lesionado con un perdigón de goma, según informaron desde el gobierno. Además, el Jefe de

Estado descartó que hubiera desigualdad de trato entre carabineros y civiles heridos. "No hay ninguna diferencia", dijo.

Aunque en La Moneda creen que el ambiente irá mejorando, dicen que se requerirá tiempo. Y recalcan que los anuncios realizados deben explicarse mejor, por lo que se está trabajando en un diseño con mayor despliegue de ministros. Eso último, en todo caso, ha sido complejo, ya que varios secretarios de Estado reconocen que han sido increpados en la calle.

En privado, una docena de parlamentarios oficialistas ha expresado su desazón por la forma en que el gobierno ha manejado la crisis y, en particular, apelan a cierta "falta de urgencia" en las soluciones.

Si bien han defendido en público la agenda social, las mismas fuentes comentan que "no es suficiente". De ahí que los distintos partidos de Chile Vamos hayan convocado a reuniones extraordinarias con el fin de trabajar en propuestas para que el gobierno pueda incorporar.

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El ministro Briones conversando con camioneros.[/caption]

En el análisis oficialista, además, califican de "errores" algunas de las intervenciones del Mandatario. Recordadas son su alusión a que estamos en "guerra" o cuando fue a una pizzería a celebrar el cumpleaños de un nieto, justo cuando se desató la crisis. En todo caso, son varios también los que reconocen que el Presidente "ha tenido un cambio de tono", pero comentan que aún se percibe "falta de conexión" con lo que está pasando.

En el bloque, de todas maneras, destacan las vocerías de Rubilar, a quien ven como una figura positiva. En este contexto, además, el titular de Hacienda, Ignacio Briones, ha tenido un sello distinto al de su antecesor, explicando las medidas por redes sociales y, por ejemplo, este miércoles conversó de manera espontánea con un grupo de camioneros mientras protestaban en la autopista.