”La compañía experimentó un aumento inesperado de US$10 millones en pérdidas de seguridad que afectaron los márgenes de ganancias”, dijo Mark Eubanks, CEO de Brink’s, en la conferencia con los inversionistas de la firma de seguridad, que el 16 agosto pasado protagonizó un cinematográfico robo de $ 11 mil millones desde sus instalaciones en Rancagua.

“La pérdida se debió a un robo en América Latina, que actualmente se encuentra bajo investigación. Se trata de un problema de sincronización entre el tercer y cuarto trimestre, similar a un incidente anterior en Canadá. No esperamos un mayor impacto este año”, sostuvo el ejecutivo al ser consultado por los inversionistas de la firma norteamericana, respecto del ajuste que por las pérdidas de ese robo se hizo al EBITDA de la compañía, que llegó a US$217 millones.

El 16 de agosto pasado, un grupo de delincuentes entró a las oficinas de Brink’s en Rancagua, con el apoyo de trabajadores de dicha sucursal e intimidando a otras funcionarias de la misma, mientras en forma paralela la policía era distraída con la quema intencional de vehículos en distintas partes de la comuna.

La Fiscalía de Análisis Criminal O’Higgins que investiga el caso por los delitos de robo con intimidación, asociación criminal, receptación de vehículos e incendios, ya tiene a 28 imputados, cinco de los cuales son ex funcionarios de Carabineros. Todos están en prisión preventiva.

El robo a la sucursal de Brink’s en Rancagua ascendió a $11.465.818.468, unos US$ 11 millones al cambio actual. La empresa afectada reveló el monto exacto en su querella a los involucrados.

En la conferencia con los inversionistas, el CEO de Brink’s informó que, al tercer trimestre, la firma de seguridad y transportes de valores logró “un sólido crecimiento orgánico” del 26 % en sus negocios de gestión de efectivo y objetos de valor, soluciones digitales para pequeños comercios y la administración de cajeros automáticos. Gracias a la demanda por esos servicios, empujada desde la propia compañía, estas líneas de negocios ya representan más del 23 % de los ingresos totales de la empresa y se espera que generen un crecimiento orgánico de más del 20 % en 2024.

Al tercer trimestre, Brink’s, con base en Richmond, Virginia (Estados Unidos), registró ingresos por US$1.260 millones (un 2,5% más que en el tercer trimestre de 2023) y una utilidad neta de US$28,9 millones (una reducción del 37% respecto del tercer trimestre de 2023).

Acorde a Eubanks, este crecimiento se vio parcialmente compensado por el fortalecimiento del dólar estadounidense, así como por los vientos en contra cíclicos del mercado de los servicios globales. “Las ganancias reflejan el flujo de estos ingresos y el impacto temporal de una gran pérdida de valores durante el período. La generación de efectivo ha mejorado gracias a una mejor eficiencia del capital y una mejor gestión del capital de trabajo”, sostuvo el CEO.

Al ser consultado por las pérdidas de valores, el ejecutivo explicitó que “la empresa utiliza datos históricos para planificar las pérdidas, sin embargo, el momento de los grandes eventos de pérdida es difícil de pronosticar trimestralmente. Dada la forma en que gestionamos el riesgo de pérdida de valores, no esperamos que el aumento del tercer trimestre afecte nuestra perspectiva para todo el año”.

En sus resultados, la firma también mencionó haber ajustado la posible pérdida estimada de US$9,5 millones por el caso de colusión por el cual es investigada en Chile tras una denuncia de la Fiscalía Nacional Económica (FNE), que en 2021 acusó a Brink’s, Prosegur y Loomis, las tres líderes de la industria, de haberse coludido entre 2017 y 2018 para fijar los precios de sus servicios.

“En los primeros nueve meses de 2024, reconocimos un ajuste de US$1,1 millones y un ajuste de US$0,5 millones a la pérdida estimada en 2023. Los ajustes posteriores a 2021 se relacionaron principalmente con cambios en los tipos de cambio, así como con los costos legales de terceros asociados con este asunto”, y explica la firma en su entrega de resultados, donde detalla que esa plata se relacionaba con una posible multa de la agencia antimonopolio chilena.

“Estos costos no se consideran parte de las operaciones y actividades de generación de ingresos de la compañía. Además, la naturaleza de estos importes, incluida la pérdida estimada y los costos asociados de terceros, es tal que no es razonablemente probable que se repitan en un plazo de dos años, ni hubo cargos similares en los dos años anteriores al evento subyacente”, sostuvo la compañía.