G4: el estándar que busca la transparencia total de las empresas
Declarar los impactos que una empresa genera a su entorno social, natural y económico es un ejercicio de pocos fans en Chile. Mayoritariamente una tarea que han asumido grandes empresas y cada una lo ha hecho conforme esencialmente al criterio del Global Reporting Initiative (GRI), pero decidiendo a su manera qué tipo de contenidos son los que publicará.
Lo segundo no es privativo de las compañías chilenas. Justo por eso es que GRI, que es una de las metodologías más conocidas en el mundo (en Chile la eligen el 87% de las empresas), ha ido ajustando su metodología y haciéndola cada vez más enfocada en que las firmas hagan un real trabajo de transparencia cuando reporten.
El año pasado, esta entidad lanzó la última versión de esta metodología, GRI4 y uno de los aspectos que cambia es lo relativo a los niveles con que cada empresa autodeclaraba el nivel de madurez de su reporte con letras A, B y C (siendo A y B los más altos). "En Chile, el 90% se consideraba A o B, que es una manera de decir que están reflejando en sus reportes un alto porcentaje de sus temas de sustentabilidad. ¿90% de las empresas considera que su proceso está tan maduro? Hay que ponerse la mano en el corazón, nunca hablan de las huelgas, de… ¿me explico?", dice Daniela Winicki, de PwC.
La ejecutiva presentará hoy un estudio sobre la reportabilidad en Chile, en un evento para lanzar el GRI4 en el edificio Telefónica. Una expositora clave del día será Elena Pérez, Network Relations Coordinator de GRI.
Uno de los aspectos más importantes que aborda el nuevo estándar es la materialidad, o relevancia y pertinencia de los datos que se reportan. Por ejemplo, que estén de verdad vinculados al hacer de la empresa y que sean los que los públicos de interés identifican también como impactos. "Ahora te dicen: ponga en el reporte solamente información relevante y no ponga chimuchina. Eso es porque las empresas salían a buscar temas que no le afectaban y hacían check list. Por ejemplo, bancos declarando trabajo infantil, cuando en eso no tienen nada que reportar, porque es obvio que no vas a encontrar niños trabajando en un banco", explica Daniela Winicki.
G4 también persigue que las empresas publiquen no sólo donde les va bien, sino también donde les va mal. Para eso es importante que el ejercicio de materialidad, que consiste en determinar los temas relevantes con los públicos de interés de cada compañía, se haga y también se reporte.
¿Qué tan preparadas están las empresas chilenas para dar este salto? El estudio hecho en 77 reportes realizados desde 2011, muestra que "el 73% menciona temas de materialidad. El 37% pone la lista de los temas que salieron del ejercicio de materialidad, pero solamente el 35% publica el proceso completo y eso es lo que pide G4", sigue Daniela Winicki.
No obstante la demanda por mayor transparencia, hay un par de empresas que ya están usando este estándar para sus reportes del año. Una es Falabella Financiero. "Decidimos regirnos por la metodología G4, ya que ésta nos permite ir a la vanguardia en materia de sostenibilidad, al reportar los indicadores en los que la empresa tiene una real injerencia, trabajarlos de forma más íntegra con el negocio y mejorar aún más lo que veníamos haciendo hasta ahora", explica Jorge Fernández, gerente corporativo de Planificación y Desarrollo de Falabella Financiero.
"Esto ha implicado desafíos como, por ejemplo, llevar a cabo un proceso de materialidad, abordando los distintos grupos de interés de Falabella Financiero e identificando los temas de importancia para ellos; reforzar el impacto del gobierno corporativo (lo que ya era relevante para nosotros); y revisar nuestra cadena de valor desde el foco de la sostenibilidad del negocio", agrega el ejecutivo.
Otro ejemplo es el de GNL Quintero, que debutará en el mundo de los reportes de sustentabilidad con G4. "La decisión de usar el estándar más exigente responde a una de las razones principales de querer, en primer lugar, reportar nuestra situación en materia de sustentabilidad. Esto es, junto con comunicar al resto lo que más les interesa saber sobre nuestra gestión (una de las características de G4 y su énfasis en la materialidad o pertinencia de lo que se está reportando), medirse con una vara exigente para saber cuáles son nuestros reales y objetivos avances, y cuáles nuestros desafíos pendientes. Sólo al conocer la brecha entre lo hecho y lo por hacer, es posible tener una hoja de ruta para cumplir de forma transparente nuestro genuino compromiso con la sustentabilidad", dice Alfonso Salinas, gerente de sustentabilidad de GNL Quintero.
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