La ministra de Energía, Susana Jiménez, llamó a la gente a tener paciencia en cuánto a una baja de los precios tras las últimas licitaciones de 2016 y 2017, ya que el traspaso comenzaría recién en 2021.

"Vamos a tener que tener un poco de paciencia, se pudieran materializar las bajas de precio, pero no antes de los plazos que he indicado", dijo en Pulso TV.

"Lo que se vio en las últimas licitaciones son precios más competitivos, pero recordemos que la última licitación que se realizó se hizo con 7 años de anticipación a la obligación de suministro. Es decir, las licitaciones que conocimos tanto el 2016 como 2017, son licitaciones que se van a materializar en suministro a partir del 2021 y 2024. Esto se hizo así pensando que el desarrollo de proyectos tomaba más años, para poder ejecutarse. De hecho se legisló para anticipar esas licitaciones a lo menos 5 años antes de la obligación de suministro, pero es verdad que los cambios tecnológicos nos están llevando al desarrollo de fuentes de energía renovables que son mucho más rápidos en su ejecución y en su proceso de obtención de permiso, por lo tanto para clientes regulados va a tomar tiempo", agregó.

Pero hay una excepción a la regla. "No es así para otros clientes libres que pueden renegociar sus contratos y que por lo tanto no están sujetos a las licitaciones de suministro"

En cuanto a la megalínea de transmisión eléctrica Cardones-Polpaico, la secretaria de Estado, afirmó que no ha recibido ninguna información de que el proyecto no esté terminado a fines de este año. Esto luego que el Coordinador Eléctrico hizo público un informe que muestra un retraso importante de la iniciativa.

"Hemos estado trabajando para que así sea. No he recibido ninguna comunicación oficial de que no fuera así, y de ser así seguiremos insistiendo en que esto logre llegar a término. Tiene algunas dificultades particulares en la V Región, que es el tramo final y esperamos que eso se resuelva, y podamos ver esta línea terminada lo antes posible", indicó la ministra.

Cabe destacar que la empresa detrás del proyecto que costará US$1.000 millones, indicó que se cumplirán con los plazos estipulados. La ministra se refirió además a las dificultades que ha enfrentado la iniciativa que abarca cuatro regiones del norte del país, especialmente con las comunidades.

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"Creo que hay un tema, que fue una línea licitada años atrás que se regía por el régimen vigente, que era una licitación de obra que lleva la construcción de un punto a otro. Eso de alguna manera se ha legislado. Esto partió en el primer gobierno de Sebastián Piñera, y fue materializado después con la ley de transmisión en el gobierno anterior, y lo que busca es que para estas grandes líneas pueda hacerse un estudio previo, y ese es el estudio de franja. Lo que va a buscar es levantar las alertas que pueda haber no solo del punto de vista de comunidades, también del punto de vista de patrimonio, de interés turístico, todos los objetos de valoración que pueda haber en los tramos, y establecer para aquellas líneas que tienen un mayor grado de conflictividad, una franja sobre la cual se va a licitar, y por lo tanto se va a tener a la vista todos esos objetos de valoración, previo a la licitación", ahondó Jiménez.

Y recalcó que es muy difícil que con el actual sistema de transporte de energía no haya algún tipo de conflicto. "Ya se dio a conocer el nuevo plan de expansión que incluye una línea muy larga, y para ella vamos a hacer este proceso. Nunca va a evitar que haya conflicto u oposición, pero lo importante es tener presente que esto es necesario, que la energía la necesitamos para vivir, entonces mientras no tengamos otra forma de transportar energía que no sea a través de línea de transmisión, vamos a tener que buscar la mejor forma de desarrollarla"