Paulina Yazigi: Liberal, lejana al mundo político y crítica del proyecto de pensiones: cómo es la nueva presidenta de las AFP

No tiene militancia política, pero se confiesa como de centroderecha, liberal en lo económico y consciente de la carga ideológica que ha rodeado el debate en torno a las administradoras privadas de pensiones. Paulina Yazigi (45 años y tres hijos), la nueva presidenta de la Asociación de AFP a partir de marzo próximo, llegará a liderar el gremio en medio de la tramitación de la reforma de previsional del gobierno y el rediseño del relato y una estrategia comunicacional cuestionada al interior de la industria.

La ingeniera comercial de la UC y máster en Matemáticas en Finanzas de la Universidad de Nueva York, reemplazará a la economista Alejandra Cox, quien vio golpeado su perfil público tras unas polémicas declaraciones en pleno debate sobre el tercer retiro desde las AFP. “Nicanor Parra trabajó hasta los 103, tenemos que potenciarnos como activos mientras la salud lo permita”, dijo en mayo de 2021, desatando una ola de reaccciones desde el mundo político y la inquietud de las propias administradoras.

La AFP, que entienden que no hay espacios para nuevos errores en una etapa en que la discuscusión de la reforma de pensiones entra a hilar fino, pusieron sus fichas en el perfil menos político y más técnico de Yazigi para enfrentar un debate público que promete intensificarse durante este año.

“El mundo político no ha sido mi mundo, yo pertenezco más al mundo financiero. Habrá que hacer esa pega (de generar mayores puentes con el mundo político)”, reconoce Yazigi, quien dejó la gerencia de la División de Mercados Financieros del Banco Central en diciembre pasado.

Un alto ejecutivo de una AFP recuerda que el proceso de selección para liderar el gremio estuvo marcado por candidatos con distintos tipos de fortalezas. “Hubo bastantes alternativas y optamos por Paulina por sus fuertes atributos técnicos y también comunicacionales como se le ha visto en sus columnas de opinión. Explica en fácil cosas complejas”, argumenta la misma fuente de la industria.

Tras su paso por ingeniería comercial de la Universidad Católica, donde conoció a Nicolás Noguera, Felipe Kast y Fernando Larraín (exgerente general de la Asociación de AFP), entre otros, entró a trabajar al Departamento de Estudios del banco BBVA. Allí su primer jefe fue el exsuperintendente de AFP Guillermo Larraín, quien le reconoce a la economista una alta capacidad analítica.

“Conozco a Paulina desde que salió de la universidad. Fui su primer jefe y me impresionó siempre su inteligencia, capacidad analítica para tratar temas complejos e ir a lo fundamental. Es una persona eficiente, inteligente, culta; tengo muy buena impresión de ella”, opina Larraín.

Pero la nueva presidenta de las AFP siguió su ascendente carrera como analista macro y portafolio manager en Compass Group en Chile y Nueva York, y llegó a la gerencia de Inversiones y de Research y Economía en Credicorp Capital.

A continuación, y antes de aterrizar en el Banco Central, Yazigi fue gerenta de Inversiones del family office Inversiones Nogaleda -de la familia Noguera- y directora de Redbanc y de la Bolsa Electrónica, entre otros cargos.

“En temas económicos me considero muy liberal y de centroderecha. Para mí los mercados funcionan con los incentivos correctos. Prefiero una presencia del Estado mucho más pequeña y un sector privado más grande. Para los otros temas tengo una visión más social”, añade la también exinvestigadora de Horizontal, el think tank ligado a Evópoli y cuyo presidente es el excandidato a la Presidencia, Ignacio Briones. “Con Ignacio (Briones) tengo una relación profesional cercana y lo admiro mucho”, reconoce Yazigi.

Pero su ascendente carrera también ha sabido de complejidades y de apuestas menos exitosas. Eso fue lo que vivió en su paso por la gerencia de la División de Mercados Financieros del Banco Central, donde solo estuvo un poco más de un año, tras arribar en octubre de 2021.

En mayo de 2022, tras el descubrimiento de un fraude por la suplantación en el pago de US$ 205 mil a la consultora estadounidense RVK por servicios prestados en 2021, el Banco Central no solo denunció el hecho al Ministerio Público, sino que también despidió a un gerente y sancionó administrativamente a diversos ejecutivos de la defraudada División de Mercados Financieros, a cargo, precisamente, de Yazigi. “Fueron momentos muy duros”, recuerda Yazigi, quien también fue sancionada por el instituto emisor, el que hizo valer la línea de jefatura.

Quienes conocen la interna del Banco Central confidencian que fue un episodio “dolorosa y difícil” para la institución y para la propia economista,

“Si me preguntan si me hubiera gustado que el Banco hubiera actuado de otra forma, quizás (diría que) sí. Pero entiendo que el Banco estaba supertensionado y fueron momentos muy difíciles, el 2022 fue un año durísimo para todos en el ámbito financiero y político”, reflexiona hoy Yazigi.

Cabe recordar que en 2022 el Banco Central debió lidiar, en lo técnico, con la mayor inflación del país en 30 años -cerró en 12,8% en diciembre-, lo que implicó que subiera la tasa de interés hasta un máximo de 11,25%. En paralelo y ante una alta volatilidad del tipo de cambio, en julio anunció una intervención cambiaria, cuando el precio del dólar ya superaba los $1.000. Y además, en lo político-institucional, su gobernanza fue objeto de revisión y cambios en la rechazada propuesta de la Convención Constitucional.

Otro tema que surgió en el paso de Yazigi por el ente rector, fue el eventual conflicto de interés que podría e manar del nuevo cargo de su esposo, el ingeniero civil Álvaro Taladriz, quien asumió en noviembre del 2022 como portfolio manager de la gestora financiera brasileña Absolute Investimentos.

Justo cuando el Banco Central estaba en pleno proceso de análisis de las posibles incompatibilidades al respecto, la profesional anunció su salida de la institución, aduciendo que le era difícil compatilizar las exigencias de su cargo con la vida familiar. Dentro del instituto emisor fue una sorpresa para todos, porque había una buena evaluación de su trabajo y se le veía entusiasmada llevando adelante el proceso de cambios de su unidad.

Consultada, Yazigi reafirma que su renuncia pasó por razones familiares. “Me fui del Banco Central porque era mucha responsabilidad en el sentido de tener un equilibrio laboral-familiar adecuado”, dice la economista.

En sus primeros meses en el Banco Central tuvo la oportunidad de compartir con el entonces presidente del organismo, Mario Marcel, y en su estadía también estrechó vínculos con el actual gerente de División de Política Monetaria, Elías Albagli, quien fue su compañero en la universidad.

“Conocí a Marcel (actual ministro de Hacienda) en el BC. Tengo la mejor opinión de él y lo admiro mucho”, afirma Yazigi.

Luego de su salida del instituto emisor el 15 de diciembre de 2022, Yazigi fue contactada por un head hunter para participar en el proceso de búsqueda del nuevo líder de la Asociación de AFP. “Cuando renuncié al Banco no sabía nada de esta posibilidad. Fue muy sincrónico y una coincidencia absoluta. Había decidido no buscar trabajo inmediatamente, porque el conflicto de interés era muy grande”, recuerda la profesional.

En medio del debate político por la reforma de pensiones lanzada por el gobierno el año pasado y los sucesivos retiros desde los fondos de las AFP en los últimos años, la industria ha estado en el “ojo del huracán”. Sin embargo, Yazigi cree que durante el último tiempo las AFP han logrado mejorar su deteriorada reputación.

“A diferencia de hace cuatro o cinco años desde que empezó el movimiento No+AFP, las administradoras han logrado restablecer su reputación de alguna forma. Los retiros, los cuales no avalo para nada, demostraron que las AFP hacen bien la pega a los ojos de la gente. Ha cambiado mucho la percepción”, sostiene, y califica de “bastante imperfecta” la reforma del gobierno.

“Los opositores a las AFP, que tienen un tema bastante ideológico, han sido muy activos en promover la mala fama de las AFP, por lo que hay que hacer la pega con mucho ímpetu para demostrar lo contrario”, añade la economista, dando sus primeras definiciones como nueva líder del sector.

“Me gustan los desafíos”, concluye Paulina Yazigi al esgrimir las razones para tomar el liderazgo de la industria privada de pensiones en esta coyuntura