Trabajadores del cobre congelan participación en la CUT a la espera de que se limpie padrón

Las irregularidades del fallido proceso electoral de agosto de 2016 en la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) aún siguen generando heridas. Sumado al congelamiento en las relaciones con la Central que anunció el Colegio de Profesores y a la idea de la Confusam de evaluar dejar la CUT tras la postergación del voto universal en el último congreso, la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC) decidió suspender su participación en la multisindical hasta nuevo aviso.

"Nosotros dijimos que no participábamos hasta que la CUT no tomara posición de responsabilidad y transparencia, que nos dé garantías que los que van a participar (en la próxima elección) son los reales. Eso no ha ocurrido, pusimos las cosas en su lugar y dijimos que no íbamos a cotizar ni a participar del último congreso", dijo Guillermo Lemaitre, miembro de la mesa directiva de la FTC y actual consejero de la CUT por la lista que encabezó Arturo Martínez en los comicios de 2016.

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La FTC agrupa a cerca de 15.000 trabajadores directos de Codelco y también representa a sindicatos de Anglo American Sur. En abril de 1953 participó en la constitución de la Central Única de Trabajadores, antecesora de la actual CUT.

Lemaitre criticó a Bárbara Figueroa (presidenta de la CUT) y Nolberto Díaz (secretario general), "que impugnaron la elección antes de saber los resultados y siguen participando", disparó. También cuestionó que se saquen cuentas alegres del Congreso Nacional Ampliado del 27 y 28 de enero: "Se ve que la cosa ya tiene traje a la medida y la FTC no se va a prestar para eso. Estamos esperando que la situación se clarifique y que la Dirección del Trabajo se pronuncie, que se ponga los pantalones para fiscalizar".

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Varias organizaciones sindicales acusaron irregularidades durante el último congreso de la Central, que aprobó realizar nuevas elecciones en abril, postergar al 2020 el voto universal y no aplicar cambios sustantivos en la confección del padrón electoral.

A juicio de Lemaitre, la limpieza del número de afiliados sindicales, el pago de cuotas y su real ponderación en la votación es la clave para que la FTC vuelva a participar en la Central. "Nosotros somos partícipes de una CUT ordenada, que voten los que tienen que votar, sin padrones inflados. Si eso no se da, no vamos a participar en la organización", dice el dirigente.

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El universo de afiliados a la CUT se estima en 580 mil trabajadores. Sin embargo, en las elecciones no vota esa cifra de personas. Cada sindicato, gremio o federación que tiene sus cuotas pagadas al día, elige a sus directivos, y son estos los que emiten un voto en representación de sus bases. De ahí que en los comicios de 2016 se repitieron los cuestionamientos al dudosamente democrático sistema de votación y problemas de transparencia en el padrón, lo que terminó en dos demandas en la justicia electoral y en la repetición de la elección.

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La presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores, Bárbara Figueroa, no tardó en reaccionar a la medida de la FTC. "Está en línea con lo que han planteado otras organizaciones, en un tono distinto es una postura similar a la del Colegio de Profesores. Esto es parte de un debate que teníamos pendiente y que hoy lo estamos haciendo. Habrá que comentarles a la FTC las resoluciones para que con esa información ellos puedan ir decidiendo qué hacer. Uno no debe dramatizar las exigencias de los gremios, puede que a uno no le gusten las formas en que se hacen, pero cuando se siente un compromiso con la Central, como es el caso histórico de la FTC, no puedo suponer que detrás de esa posición lo que se está buscando es que la CUT se desplome", señaló.

Figueroa también desestimó las críticas de fondo y llamó a los gremios a informarse de las resoluciones del último congreso. "Las organizaciones deben tener la disposición a conocer lo que ha sido el debate del congreso y sus resoluciones. Estamos dando pasos que dan cuenta de los requerimientos y exigencias que las organizaciones nos están haciendo", concluye.