5 recomendaciones para familiares y cuidadores de personas con Alzheimer

El Alzheimer es una enfermedad difícil. La persona que lo padece, comienza a deteriorarse, perder la memoria y sufrir episodios de desorientación, hasta que lograr una tarea sencilla es imposible de realizar.

Estos cambios de conducta y personalidad son irremediables, por lo que los familiares y cuidadores de las personas deben comprender la enfermedad y tener mucha paciencia para apoyarlos de la mejor manera.

Pero también son ellos quienes deben recibir soporte.

“Es fundamental brindar apoyo no solo a los pacientes, sino también poder dar contención y acompañar a su círculo más cercano, que es el que día a día transita junto a ellos en el avance de la enfermedad y actúa como su imprescindible red de apoyo”, aseguró la doctora María Roca, coordinadora científica de la Fundación del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), a Infobae.

Estos son los consejos que distintos especialistas de INECO reunieron para acompañar a aquellos que padecen la enfermedad.

1. Entender que es un trabajo en equipo. El tratamiento del Alzheimer está basado en el trabajo conjunto de distintas disciplinas: medicina, terapia ocupacional, neuropsicología, fonoaudiología e incluso otras terapias, como el arte. Cada una juega un rol en cada etapa de la enfermedad, por lo que es importante que el cuidador del paciente logre coordinar el trabajo. Los profesionales también deben velar por el apoyo al cuidador.
2. Brindarle tranquilidad al paciente. Cuando la enfermedad progresa, la persona puede confundirse y no saber si es de día o de noche, por lo que comienzan a irritarse y no entender qué sucede a su alrededor. Es recomendable que los cuidadores logren comprender de dónde vienen las reacciones y la confusión, pues es el primer paso para ayudarlos a sentirse tranquilos. Explicarles en un tono amable y distraerlos pueden contribuir a que el paciente se sienta más seguro.
3. Llevar la mente del paciente a un lugar seguro. Los recuerdos comienzan a desvanecerse y el paciente puede sentirse ajeno a su identidad, lo que provoca angustia en él y quienes lo rodean. En estos casos, acompañarlos desde el entendimiento es fundamental. La recomendación es acercarlos a su identidad a través de canciones, recuerdos, acompañamiento al pasado y traerlo al presente de manera segura.
4. Entender que más allá del deterioro cognitivo, hay afecto. Aunque exista una pérdida de los recuerdos y el reconocimiento propio, el paciente todavía sigue queriendo y amando a sus familiares, pues los recuerdos emocionales permanecen. Si bien puede que confunda los nombres de quienes más quiere, sigue recordando los nombres.
5. Quienes cuidan también deben ser cuidados. Usualmente, el cuidado y asistencia de los pacientes con Alzheimer recae sobre algún familiar y, en general, sobre las mujeres. Pronto, en la persona que cuida pueden aparecer síntomas como el agotamiento físico, pero también emocional. Es importante que quien cuida tenga su propia red de apoyo y pida ayuda cuando lo necesite, además de no descuidar el tiempo propio, pues es la única forma de poder cuidar a los demás.