Así es el peligroso y mortífero proyectil que Ucrania y Rusia utilizan en la guerra

Miden 155 milímetros y son las municiones más solicitadas del conflicto bélico contra Rusia. Ucrania utiliza esta artillería y, a pesar de que Estados Unidos ya le ha enviado más de 1,5 millones de rondas, todavía quieren más.

Y es que estos proyectiles son grandes y funcionan para provocar distintos daños mortíferos: pueden empaquetarse con material altamente explosivo, usar sistemas guiados con precisión, perforar fácilmente armaduras o producir una alta fragmentación. Es decir, son armas letales, que producen un gran daño y que son esenciales en este tipo de escenarios.

El cartucho de 155 mm es una bala grande, que está compuesta por cuatro partes: el fusible detonante, el proyectil, el propulsor y el cebador. Cada ronda que tiene mide aproximadamente 60 centímetros de largo, pesa alrededor de 45 kilogramos y tiene 155 mm o 6.1 pulgadas de diámetro.

Se utiliza en sistemas de obús, unos grandes cañones remolcados, cuya característica es tener un ángulo de disparo con gran alcance.

“Si tienes un proyectil demasiado pequeño, no hará suficiente daño y llegará muy lejos. Si tienes un proyectil más grande, no necesariamente puedes dispararlo tan lejos. Este es el término medio más común, y es por eso que se usa tan ampliamente”, dijo Ryan Brobst, analista de investigación de la Fundación para la Defensa de las Democracias, según Infobae.

Entonces, en la guerra se ocupa para atacar objetivos que estén de 24 a 32 kilómetros de distancia, según la ronda y sistema de disparo que se utilice, por lo que son sin duda unas armas muy valoradas por las fuerzas terrestres para poder eliminar enemigos, pero siempre desde una distancia protegida.

“Los adversarios no tienen mucha advertencia de que venga y es más difícil esconderse de las rondas entrantes que se arquean desde la parte superior, lo que lo hace altamente letal”, explicó Brobst.

En el país, la parlamentaria ucraniana Oleksandra Ustinova, afirmó que se disparan proyectiles de 155 mm a un ritmo de 6.000 a 8.000 por día. No obstante, también confesó que los rusos disparan cerca de 40.000 del mismo tipo.

Y ahora, en vísperas de preparación para una contraofensiva esta primavera, Yehor Cherniev, miembro del Parlamento de Ucrania, dijo que es posible que el país necesite disparar entre 7.000 y 9.000 proyectiles de 155 mm al día para no quedarse detrás.

Ante esta solicitud, la administración de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha estado enviando municiones directamente desde los arsenales militares estadounidenses, en lugar de esperar y comprar rondas de empresas de defensas, todo esto para que puedan llegar a tiempo para la contraofensiva.

Además, EE.UU. está entrenando a las tropas ucranianas en Alemania para mejorar los cartuchos en tácticas de armas combinadas, coordinando ataques con información que proporcionan las tropas avanzadas y otros sistemas blindados. Todo esto es para maximizar el daño y reducir la cantidad de rondas necesarias para acabar con un objetivo.