La polémica propuesta de China que busca prohibir la ropa que “hiere los sentimientos de la gente”

Una estricta propuesta de ley causó revuelo en China: la libre elección en la forma de vestir de las personas podría resultar en detenciones y multas. Así es el plan que anunció el gobierno chino, donde se castigaría “usar ropa o portar símbolos en público que sean perjudiciales para el espíritu del pueblo chino y hieran los sentimientos del pueblo chino”.

Esta medida —que todavía no se ha implementado— fue ampliamente criticada por juristas, periodistas y empresarios chinos, quienes aseguraron que, de aprobarse, le da demasiado poder a las autoridades para vigilar “cualquier cosa que no les guste”.

De hecho, la situación despertó recuerdos de la historia en China, en la década de los 80, donde los pantalones campana o los jeans eran considerados “atuendos extraños” y se prohibía la entrada a algunos edificios gubernamentales a los hombres que llevaban el pelo largo o las mujeres que utilizaban maquillaje y joyas.

Sin embargo, algo más preocupa profundamente a la población china: no existe una definición clara de qué es el delito, por lo que estaría sujeto a la interpretación de cada funcionario.

“Si los funcionarios pueden ampliar arbitrariamente las interpretaciones y aplicaciones de la ley basándose en preferencias personales y creencias ideológicas, puede que no estemos lejos del concepto de ‘si quieres acusar a alguien, siempre puedes encontrar un pretexto’”, aseguró Zhao Hong, un profesor de la Universidad China de Ciencias Políticas y Derecho en Beijing en el sitio de noticias The Paper.

Bajo el poder del líder de China, Xi Jinping, muchos expertos aseguran que su gobierno ha estado “obsesionado con el control: cómo piensa la gente, qué dice en línea y, ahora, qué viste”.

Una mirada demasiado conservadora, pues se han censurado medios de comunicación y redes sociales, donde está prohibido mostrar tatuajes y hombres con aretes.

Pero ahora, si esta enmienda se aprueba el 15 de septiembre, vestirse de forma “extraña” podría costar multas de hasta 680 dólares (607.000 pesos chilenos aproximadamente) y hasta 15 días en prisión.

De esta manera, China se posicionaría como uno de los países socialmente más conservadores. Incluso, los críticos están comparando al país asiático con Irán y Afganistán, cuyos gobernantes religiosos también eligen cómo se debe vestir la población.

Lo más preocupante es que no se especificó qué atuendo constituiría un delito, por lo que podría ser una interpretación ambigua que cause problemas, pues estaría a merced de la ideología de cada autoridad que quiera detener a un habitante chino.