Por qué es probable que tu lectura de presión arterial sea incorrecta

La presión arterial alta, también conocida como hipertensión, afecta a más de 1.200 millones de personas y es una de las principales causas de muerte prematura en el mundo, según describe la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A pesar de ser un problema de salud frecuente en la población, casi un 50% de los pacientes desconocen que sufren de hipertensión y solo un 21% la tiene bajo control.

Los organismos internacionales y profesionales del área de la salud suelen repetir que medir habitualmente la presión arterial es una estrategia clave para la prevención y diagnóstico temprano, aún más si en el historial familiar han existido casos con la afección. La hipertensión también es un factor de riesgo para la insuficiencia cardíaca, infartos de miocardio, derrames cerebrales, insuficiencia renal y otras enfermedades.

Así como es importante medir la presión arterial con regularidad, también lo es que el procedimiento se realice correctamente. Sin embargo, eso no siempre sucede.

Según The Wall Street Journal, a menudo ocurre que pacientes y profesionales de salud no siguen todos los pasos necesarios para medir la presión arterial.

Una postura inadecuada, la forma en que la persona pone su brazo, haber consumido café o alimentos e incluso haber charlado con alguien durante las mediciones, son solo algunos de los factores que podrían incidir en que una lectura sea errónea.

“Para realmente hacer mella en la mejora de la salud cardiovascular de las personas, necesitamos examinar y tratar a las personas para detectar la hipertensión, pero debemos hacerlo correctamente”, explicó al medio estadounidense la Dra. Tammy Brady, nefróloga pediátrica del Centro Pediátrico Johns Hopkins.

Si la medición de la presión arterial no se realiza de la forma adecuada, es posible que aparezca una lectura excesivamente alta en lugar de muy baja. Según un estudio publicado en JAMA Internal Medicine en octubre de este año, dos posiciones de los brazos comúnmente utilizadas en este procedimiento -sobre el regazo o al costado- provocaron “una sobreestimación sustancial de las lecturas de la presión arterial”, lo que eventualmente puede llevar a un diagnóstico erróneo de hipertensión.

En otro estudio publicado en 2023 en la misma revista, investigadores identificaron que los brazaletes muy pequeños usados en la prueba provocaban que las mediciones de presión arterial fueran elevadas, y los brazaletes demasiado grandes, causaban que las lecturas fueran reducidas.

Una incorrecta medición también podría traer consecuencias en la salud de los pacientes, dado que podrían estar tomando fármacos que realmente no necesitan. Según expertos, quienes presentan valores de presión arterial más altos de lo que realmente tienen y consumen medicamentos para tratarlo podrían presentar síntomas como fatiga, mareos, vértigo y tienen más riesgo de sufrir lesiones.

De acuerdo a la Guía práctica de la Sociedad Europea de Hipertensión para la medición de la presión arterial en el consultorio y fuera del consultorio, para una lectura precisa se debe estar en un ambiente tranquilo, silencioso y con temperatura confortable.

La postura del paciente es clave: debe permanecer sentado, con la espalda recta y apoyada en una silla, sus piernas no tienen que estar cruzadas y su brazo -a la altura del corazón- debe estar descansando sobre la mesa.

Otras condiciones necesarias según el organismo son no fumar, no beber cafeína ni alimentos y evitar el ejercicio en los 30 minutos anteriores a la medición. El paciente debe quedarse sentado y relajado mientras dure el procedimiento y no debe hablar con otras personas.

Lo ideal es tomar tres lecturas (dos si son normales), con un intervalo de un minuto entre cada una. Luego, se debe usar el promedio de las dos últimas lecturas.