Embargos y remates: La encrucijada de la defensa de Eduardo Frei que complica a su patrimonio

A más de un año de la autodenuncia de Francisco Frei ante el Ministerio Públuico, la defensa de la familia de su hermano -el expresidente Eduardo Frei- se encuentra en una encrucijada. Ello, porque cada vez se vuelve más patente el riesgo de que sus acreedores logren rematar sus bienes para saldar parte de las millonarias deudas que dejó Francisco mientras fue gerente general de Inversiones Saturno, la sociedad de los Frei Larraechea.

A 13 meses de que el hermano menor del exmandatario denunciara que falsificó la firma y huella digital de éste usando a Inversiones Saturno como “testaferro de sus deudas personales”, el Ministerio Público aún no formaliza la investigación. A la fecha, el ingeniero comercial de la Universidad de Chile no ha vuelto a declarar ante el fiscal adjunto jefe de la Fiscalía Metropolitana Centro-Norte, Francisco Jacir. Tampoco lo ha hecho su hijo Nicolás Frei Parada, quien figura firmando hipotecas de terrenos de propiedad de la sociedad de su tío.

¿El resultado? La defensa de los bienes de la familia Frei Larraechea se ha vuelto más compleja, puesto que la estrategia legal del expresidente se basa en que éste es víctima de la estafa de su hermano, por lo cual presentó una querella en su contra en octubre de 2019. La dificultad para defender el patrimonio de Eduardo Frei tuvo una prueba prístina esta semana, luego de que el ministro de fuero de la Corte de Apelaciones de Santiago, Juan Cristóbal Mera, dictara una sentencia civil en su contra tras una demanda del Banco de Chile por una deuda impaga de $50 millones de pesos.

En ese marco, los cercanos al expresidente ven con preocupación que no existan mayores avances en sede penal para trasladar los antecedentes a los juzgados civiles que tramitan las demandas por impagos.

Según ha explicado el fiscal Jacir a querellantes del caso, la investigación es sumamente compleja. A su parecer, la extensión del periodo en que se habrían cometido los ilícitos, mucho más allá de la autodenuncia, han obligado a que el persecutor continúe las diligencias que incluyen no solo oficios a los bancos involucrados en los millonarios préstamos, sino que también la toma de declaraciones.

Jacir no ha formalizado aún a Francisco Frei puesto que sigue acumulando querellas presentadas en contra de él y su hijo Nicolás Frei, quien fue gerente comercial durante 12 años en Almacenes de Depósitos Nacionales (Almadena) y figura como aval en parte de los millonarios préstamos solicitados. De hecho, el pasado 9 de septiembre presentó un escrito al 7º Juzgado de Garantía de Santiago en el que señala que acumula un total de siete querellas presentadas a la fecha. Todas ellas quedaron radicadas en el tribunal que conoce la querella que presentó Eduardo Frei en contra de su hermano por los delitos de apropiación indebida, administración desleal, negociación incompatible, falsificación y uso malicioso de instrumento privado mercantil falso.

El escenario se vuelve más complejo para los Frei Larraechea si se considera que, en contraste con la lentitud del frente penal -paralizado además la pandemia-, el flanco civil sigue su curso. A la fecha, tres son los acreedores de Inversiones Saturno más activos ante los tribunales: Factop, Banco Security y Omega Factoring. Este último exige el pago de $50 millones a Inversiones Saturno, por lo cual logró embargar un departamento de La Parva del expresidente.

El 11° Juzgado Civil de Santiago encomendó realizar un peritaje para definir el avalúo comercial para proceder al remate. A cargo de la diligencia estará la constructora civil Patricia Zavala Contreras. El valor que entregue el peritaje que tasará el inmueble de acuerdo a variables como el año de construcción, la ubicación y sus dimensiones, será muy relevante puesto que serán el piso mínimo para el futuro remate, aseguró un cercano a la familia Frei Larraechea.

El remate del departamento en La Parva -que cuenta con un avalúo fiscal de $189 millones- sería el primero en materializarse del caso. Hoy prácticamente la totalidad del patrimonio de la sociedad familiar de los Frei Larraechea se encuentra bajo embargo. Entre los bienes más relevantes están los terrenos de Valle Escondido; la casa del expresidente Eduardo Frei ubicada en calle Baztán (Las Condes) y la Casa Museo en honor a su padre en Hindenburg (Providencia). A los cuales suma un Jeep Cherokee del año 2017, embargado por Banco Security y que busca su remate.

Por ahora, los abogados de la familia Frei Larraechea -Karen Muñoz, Carlos Pizarro y Dante Hernández- han desplegado todos sus esfuerzos por evitar que se concreten los remates, en una lógica de ralentizar los juicios a la espera de conocer mayores avances en sede penal.

Por otro lado, los abogados han iniciado una contraofensiva a fin de declarar la nulidad de los compromisos adquiridos por su hermano. A la fecha, Inversiones Saturno ha presentado cuatro demandas de nulidad contra Tanner Servicios Financieros, Nuevo Capital, Garko SpA y Omega Factoring y próximamente es muy probable que lo hagan en contra de Banco de Chile tras la resolución del ministro Mera de la Corte de Apelaciones.

Uno de los cuestionamientos vertidos en tribunales por parte de los abogados de la familia Frei Larraechea para frenar la ofensiva de los bancos y factoring es que Francisco Frei era una Persona Expuesta Políticamente (PEP) y, por lo tanto, los bancos y factoring debieron ser más exigentes en la tramitación de los créditos. La Circular N° 49 de la Unidad de Análisis Financiero, del 3 de diciembre de 2012, define como Personas Expuestas Políticamente (PEP) a “los chilenos o extranjeros que desempeñan o hayan desempeñado funciones públicas destacadas en un país, hasta a lo menos un año de finalizado el ejercicio de las mismas”.

Una de las causales que establece la normativa para ser considerado bajo dicho estatus es ser “director de sociedades anónimas nombrados por el Estado o sus organismos” y en este caso Francisco Frei fue director de TVN entre el 23 de mayo de 2000 y el 17 de marzo de 2004 y, luego, entre el 23 de enero de 2008 y el 23 de mayo de 2012.

A un año de la autodenuncia de su hermano, el expresidente enfrenta 25 demandas en su contra por deudas que ascienden a $4.221 millones.