Italia: Protestan en sedes diplomáticas brasileñas por extradición de Battisti

En las principales ciudades de Italia y frente a las sedes diplomáticas de Brasil, cientos de personas y políticos manifestaron en contra de la decisión del país sudamericano de rechazar la extradición del ex activista de izquierda, Cesare Battisti, juzgado en ausencia por un tribunal italiano por los asesinatos de dos policías, un joyero y un carnicero, perpetrados en Italia entre 1977 y 1979.

La protesta más importante se realiza en Roma, frente a la sede de la embajada de Brasil, en la céntrica Plaza Navona. Ondeando banderas de Italia, de Brasil y de la Unión Europea y lanzando humo de colores, los manifestantes han coreado consignas como "El pueblo italiano no ha olvidado, Cesare Battisti debe ser extraditado", "Toda Italia te espera, sólo Lula te defiende" o "Justicia pisoteada".

Los organizadores piden firmas para entregar al Parlamento Europeo y pedir la extradición a talia de Battisti.

En Milán, el partido federalista Liga Norte organizó esta mañana frente al consulado de Brasil una concentración a la que acudieron un centenar de militantes y en la que pudieron leerse pancartas como "Vergüenza, vergüenza" o "Battisti y Lula. El asesino y su cómplice".

También el PDL se manifestará esta tarde en la capital lombarda, con la presencia prevista, entre otros, del ministro de Defensa, Ignazio La Russa; mientras que en Turín, los simpatizantes del partido gubernamental se concentraron en el espacio del Lingotto, en las afueras de la ciudad.

En el momento de ser procesado Battisti se encontraba en Francia, donde había obtenido el estatus de refugiado político, pero huyó en 2004, cuando el gobierno galo se disponía a revocar esa condición para entregarlo a Italia. En marzo de 2007 fue detenido en Río de Janeiro, donde, según fuentes policiales, fue localizado durante una operación conjunta llevada a cabo por agentes de Brasil, Italia y Francia.

Desde entonces, Battisti permanece recluido en una cárcel de Brasilia, desde la que se ha declarado inocente y víctima de una "persecución política" por parte del gobierno italiano.