La historia fue más que el juego

Las ganas, las intenciones y el buen juego de la selección chilena se quedaron en eso. Pese a realizar una más que correcta presentación en el Monumental de Núñez, la casa de River Plate, el plantel de Juan Antonio Pizzi regresa a Santiago con una derrota. A la larga, es un resultado que no escapa a las proyecciones que se hacen cuando comienzan las clasificatorias. No obstante, la baja presentación de las Albiceleste daba esperanzas de la remontada, que al final no se dio.

La historia, nuevamente, fue más fuerte. Esa misma que pone al combinado nacional es una compleja encrucijada cuando debe visitar territorio argentino. El de anoche fue el partido número 31 entre ambas selecciones, entre cotejos oficiales y amistosos, con un registro muy favorable a Argentina.

Son 25 victorias y seis empates el registro de los albiceleste frente a los chilenos, en una historia que se inició en 1910. El 27 de mayo de aquel año fue la primera visita de Chile, específicamente en Buenos Aires. Fue una victoria transandina de 3-1. La paternidad de la selección argentina es importante cuando se juega en su terreno, pese a que en la jornada de ayer el local, por juego y por convicción ofensiva, parecía ser la Roja.

En las Eliminatorias, han sido siete las veces en que Chile ha visitado Argentina, siempre en Buenos Aires. Lo mejor que se ha obtenido han sido un par de empates, tanto para los procesos rumbo a Francia '98 y en el inicio de la ruta hacia Corea-Japón 2002, esa misma que al final nos dejó en el fondo de Sudamérica. Las últimas tres veces que se ha visitado al vecino país fueron derrotas: 2-0 en el 2007, 4-1 en el 2011 y la de ayer.

Otra de las situaciones que también evidencia que la historia entre ambos conjuntos, en Argentina, dice relación con que sólo en una oportunidad Chile mantuvo su arco en cero. Aquella oportunidad fue el 18 de abril de 2007, en un amistoso disputado en Mendoza. La Selección era dirigida por Nelson Acosta. En lances oficiales, no se ha podido mantener la valla invicta.

Para pesar del bicampeón de América, la historia se impuso.

Para Edgardo Bauza, el partido de anoche también fue importante, tanto por el resultado como por su registro personal dirigiendo en el Monumental. Luego de su décimo partido como entrenador en esa cancha, por fin el Patón consiguió ganar. Antes, no lo pudo hacer con Rosario Central, Vélez Sarsfield, Liga de Quito, San Lorenzo y Sao Paulo.