Las gestiones con privados que Piñera les pidió a sus ministros

El miércoles 1 de abril, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, informaba en un punto de prensa que el Presidente Sebastián Piñera le solicitó contactarse con las isapres y hacer gestiones para buscar una salida luego de que estas anunciaran un alza en sus planes. Finalmente, las tratativas terminaron con la intervención directa del Mandatario, ese mismo día, en una reunión en La Moneda, en la que selló un acuerdo para postergar el aumento por unos meses.

Así como el Jefe de Estado instruyó a Mañalich a realizar gestiones en esa área, también ha hecho algo análogo con otros ministros, encomendándoles tareas específicas con empresas, autoridades y distintos actores en el marco de la crisis generada por el coronavirus.

Previo al acuerdo con las isapres, Piñera le encargó al ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, hacer gestiones para buscar una salida con las empresas eléctricas, lo que se tradujo finalmente en un acuerdo que se anunció el pasado 27 de marzo.

En esa oportunidad, según fuentes de gobierno, fue Jobet quien primero le advirtió al Mandatario que había que involucrarse en la materia, debido a que en el Congreso se estaban impulsando varios proyectos de ley que buscaban cancelar el pago de las cuentas de servicios básicos.

Así, de acuerdo a las mismas fuentes, el Presidente escuchó y decidió encargarle al secretario de Estado que lograra un acuerdo con las eléctricas bajo tres criterios: que fuera un paquete voluntario de las empresas; que fuera un alivio “real” para las personas y que no se pusiera en riesgo la continuidad de las compañías.

Junto con eso, el Mandatario pensó -agregan en el gobierno- que para que el anuncio tuviera una relevancia en la ciudadanía, sería adecuado complementarlo con medidas respecto de empresas sanitarias y de telefonía. De esa manera, Jobet se coordinó con sus pares de Obras Públicas, Alfredo Moreno, y de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt.

Los tres ministros, según fuentes de gobierno, acordaron establecer el mismo criterio para seleccionar a los beneficiarios de las medidas.

Piñera, además, le encomendó al titular de Hacienda, Ignacio Briones, contactarse con los bancos, para que se comprometieran a dar liquidez a las empresas a fin de viabilizar el segundo plan económico que dio a conocer esta semana. Y en esas gestiones, el propio Jefe de Estado intervino directamente.

En paralelo, el Mandatario le pidió al ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel, que pusiera el foco en cuidar a la población vulnerable y de adultos mayores. Mientras que al canciller Teodoro Ribera le solicitó mayor agilidad para traer de regreso a los chilenos que están en el exterior, señalándole la necesidad de que llegara rápidamente a acuerdos con las aerolíneas comerciales.

En el caso de la ministra de la Segegob, Karla Rubilar, según afirman en el gobierno, el Presidente le encargó que canalizara las inquietudes de todos los alcaldes del país. Esto, con el objetivo de evitar cuestionamientos y poder buscar soluciones anticipadas.

A su par de la Segpres, Felipe Ward, en tanto, le pidió que se coordinara con las iglesias para conversar sobre infraestructura que pudiera servir en el marco de la crisis sanitaria.

Al titular de Vivienda, Cristián Monckeberg, Piñera le encargó que reforzara los diálogos con las constructoras. Esto, con el objetivo de potenciar obras de viviendas sociales.

En este contexto, el viernes 3 de abril el Presidente participó del comité interministerial de Desarrollo Social encabezado por Sichel. En esa instancia, Piñera identificó un listado de grupos vulnerables en los que deben enfocarse: niños, mujeres, adultos mayores, discapacitados, cárceles, campamentos y trabajadores informales.

Según asistentes a ese encuentro, el Mandatario pidió identificar demandas en esos grupos socioeconómicos, con el objetivo de preparar nuevas propuestas sociales que sirvan para elaborar una nueva batería de iniciativas. Y esa última tarea la reforzó en una reunión que encabezó el jueves, a las 13.30 h, con algunos ministros sectoriales. La idea -explican en el Ejecutivo- es que esta semana se anuncien medidas focalizadas en los más vulnerables.