El 14 y el amor por las marcas




Aprovechando la contingencia del 14 de febrero, el para algunos fatídico día del amor y para tantos otros un día de gustitos, romance y placer, quería aprovechar de comentar el amor de marca, esa relación que tenemos con ellas y como mantenerla viva. Como toda relación amorosa, pasamos del amor al odio, de la pasión a la indiferencia, de la ruptura al abrazo y eso sucede obviamente en nuestra relación como consumidor.  El 14 es una instancia de fuerte compra y en donde los medios y las marcas fomentan el consumo y los románticos preparan sus bolsillos.

En el último número del Harvard Business Review, aparecen algunos consejos para mantener el enamoramiento, o bien para ganarlo, no sólo este 14 de febrero, sino que en el largo plazo entre consumidores y marcas. A saber:

1. Mostrarse tal y como es:  para que el consumidor te elija primero tienes que tener muy claro como eres. En otras palabras, la marca debe conocerse a sí misma, saber exactamente cual es su ADN, atributos y diferenciación respecto al resto. Si este primer punto está a la deriva, el romance no se gestará. Sin saber quien eres, difícil podrás conquistar.

2. Saber bien quien es tu target: para encontrar a su media naranja, la marca debe tener clarísimo cual es su target, a quien dirige los mensajes e identificar lo que le gusta y busca para dejarlo enganchado desde "la primera cita".

3. La primera cita lo es todo: el primer encuentro entre la marca y el consumidor será fundamental para ver si se podría tener una relación a largo plazo o si será un "one - night stand". El flechazo aquí es fundamental. Se logra como siempre se hace en las relaciones: escuchando y entendiendo a su contraparte. Les suena?

4. Haga del "onda" inicial algo mutuo: las relaciones amorosas son bidireccionales y por lo tanto, los sentimientos deben fluir en ambos sentidos. Si el consumidor siente interés por la marca, ésta debe mostrar también mostrar interés por él. Por lo mismo, la fuerza de venta será fundamental. Como muchos dicen, en Chile no hay vendedores, sino que pasadores de tallas (caracterizado en el rubro del vestuario). El vendedor es clave para una relación satisfactoria entre consumidor y marca. Son la cara. Focalizar esfuerzos en esa área hará que el trabajo de cupido sea más fácil.

 5. Profundice en la conexión con el cliente: cuando ya estamos en plena relación amorosa entre marca e individuo, el segundo comienza a sentir un compromiso de estar a su lado, de fidelidad. Muchos hablan de "su marca". En esta etapa es cuando la marca debe estar más presente que nunca, y no dejar de sorprender con nuevos elementos que alimentarán el amor. En la pareja pueden ser flores, un regalo, una salida, con las marcas sería una buena campaña, una excelente oferta, un producto inigualable, una experiencia de compra satisfactoria.

6. Mantenga viva la llama del amor:  cuando la relación ya está consolidada, es común que corra el peligro de volverse rutinaria y aburrida. Por eso es tan importante mantener viva la llama del amor echando mano a la innovación y a la sorpresa. Las marcas que lo hacen, lideran. Apple, Red Bull, son buenos ejemplos de ello. Llevan años en el mercado y siguen sorprendiendo cada día mas.

Al final, según yo, ¿de que se trata el amor? Muy simple: dar y recibir en partes iguales.  Ahí está la clave para un romance duradero.

*Director ejecutivo ALTA Comunicación. Twitter: @pablocourard

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