¿El dinero puede comprar una vida más larga? Esto dice un estudio

La duración de la vida, también conocida como longevidad, está influenciada por la genética, pero también hay otros factores que desempeñan un rol fundamental, como el estilo de vida que se lleva a lo largo de los años.

Además de eso, quienes tienen un nivel de riqueza más alto tienden a vivir más tiempo. Así lo sugiere un reciente estudio publicado en la revista JAMA Internal Medicine.

La investigación, liderada por un equipo del Hospital General de Massachusetts (EE.UU.), analizó datos de más de 35.000 participantes mayores de 50 años que fueron seguidos por más de dos décadas en el Estudio de Salud y Jubilación. El informe cuenta con datos de la riqueza de cada individuo, como su capital inmobiliario, vehículos y otros activos, algo que no suele aparecer en encuestas de salud.

Tras ello, descubrieron que la esperanza de vida podía variar significativamente en los distintos niveles de riqueza: el grupo que pertenecía al 10% más rico vivían en promedio hasta los 86 años, que era casi 14 años más que el 10% menos rico.

Según estimaciones que hicieron con un modelo de simulación, si se igualara por completo la riqueza en todos los hogares se podría aumentar la longevidad de la población en más de dos años, lo que permitiría cerrar la brecha de mortalidad entre Estados Unidos y la esperanza de vida media en otros países ricos.

“Nuestros hallazgos coinciden con estudios previos que mostraron que la riqueza está asociada con una mejor salud, incluyendo una reducción de enfermedades cardiovasculares y asma, y una mejor salud autoevaluada”, dijeron los autores.

“La riqueza puede mejorar la salud a través de varios mecanismos, entre ellos, facilitando la residencia en barrios con escuelas mejor financiadas, infraestructura más sólida y mayor acceso a alimentos saludables; aumentando la capacidad de los trabajadores para elegir un empleo seguro; mejorando el acceso a la atención médica, dental, de larga duración y domiciliaria; y aumentando el tiempo libre para participar en actividades que promuevan la salud”, agregaron.

Pero lo anterior no debe desanimar a quienes tal vez no tienen ingresos altos y buscan tener una vida larga. Otros expertos en salud señalan que hay formas estratégicas de gastar el dinero que se tiene, y de esa manera, mejorar las posibilidades de la longevidad.

Según indicaron especialistas a The Wall Street Journal, una manera de “comprar más longevidad” es enfocarse en aquellos gastos que ayuden a conservar una buena salud, mantenerse activo y bajar el estrés.

“A menudo le digo a la gente que una de las mejores maneras de mantenerse en forma física y cognitivamente es practicar bailes de salón”, dijo Corinna Loeckenhoff, gerontóloga de la Universidad de Cornell.

Otra sugerencia de la experta es usar el dinero para eliminar los obstáculos que nos impiden avanzar hacia una vida saludable. Un ejemplo: para aquellos que les cuesta demasiado ir al gimnasio por tener hijos pequeños u otras razones, algo que puede ser útil es comprar instrumentos que permitan ejercitarse en casa.

Hay otras acciones que se pueden realizar y no necesariamente implican un gasto, como hacer una caminata por el parque y reducir el tiempo frente a las pantallas antes de dormir. Mientras tanto, otros pasos como reducir el consumo de alcohol y las salidas reiteradas a comer afuera, son útiles para ahorrar dinero y también tienen efectos beneficiosos en la salud.

Los investigadores especializados en envejecimiento aseguran que atreverse a explorar nuevos intereses o pasatiempos, especialmente en la juventud, también puede tener un impacto positivo. Esto se debe a que las actividades recreativas fomentan las conexiones sociales, la estimulación cognitiva y tener un sentido de propósito, que son factores claves para lograr un envejecimiento saludable.